El delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, ha anunciado este jueves una campaña de regeneración que pasa por identificar y financiar hasta 109 áreas preferentes de impulso a la regeneración urbana, en las que viven 1,3 millones de personas y representan el 38% de la población madrileña, además de suponer una "oportunidad de reconversión" al sector del ladrillo.

La campaña arranca inicialmente este año con 16 millones de euros, con la intención de "duplicarla o triplicarla" en los próximos años. Se centrará de manera prioritaria en la mejora de la accesibilidad y el mantenimiento de la temperatura interior de los hogares con reducción de consumo energético.

La mayoría de edificios que necesitan de forma urgente estas actuaciones son viviendas sociales construidas entre 1950 y 1980. Estas construcciones se ubican en barrios que combinan altas tasas de paro, población envejecida, infraviviendas, conatos de conflictividad social y falta de mantenimiento.

En concreto, algunas de las zonas a rehabilitar son El Lucero, UVA de Hortaleza, Los Cármenes, San Isidro, El Pilar, La Elipa o Aluche; además de cascos históricos, como el de Carabanchel, Vicálvaro o Barajas, y un buen número de colonias como la Experimental, Sandi, San Francisco Javier, San Fermín o Ciudad Pegaso.

El Ayuntamiento aportará entre el 60 y el 70% de la financiación y el resto las comunidades de vecinos, el privado. El Consistorio "estará para garantizar que la obra se realice" si el privado no tiene capacidad para llevar a cabo esta "pequeña intervención" dado que hay previsto un fondo social para eso.

"Frente al modelo expansivo que tantos cadáveres urbanísticos ha dejado, como la Ciudad de la Justicia, los desarrollos del sureste, el centro acuático o el centro de convenciones, que es el agujero más caro de España, apostamos por la renovación y la regeneración urbana", ha defendido el titular del urbanismo municipal.