El juez de Reus (Barcelona) que investiga el caso Innova, Diego Álvarez de Juan, ha alertado de que su juzgado se encuentra "al borde del colapso" por el crecimiento de esta macrocausa, y ha recordado que en septiembre pidió a la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) medidas de refuerzo y apoyo.

En una providencia de una de las piezas separadas recogida por Europa Press, el titular del Juzgado de Instrucción 3 aprovecha para hacer recuento del total de la causa: "Se han incoado 14 piezas separadas y se cuenta con más de 110 imputados y más de 40 perjudicados personados".

"La causa ha tenido un crecimiento imparable", sostiene el juez, que ha adelantado que tiene previsión de nuevas piezas y nuevas imputaciones próximamente; por todo ello, ha enviado al TSJC un plan de trabajo para implementar las medidas de refuerzo que ha solicitado.

Álvarez de Juan reconoce que "la especial complejidad y volumen de lo instruido" en el caso Innova —que se inició ante las presuntas irregularidades en este 'holding' municipal de Reus— impide que la instrucción avance con la agilidad deseada.

La providencia

En esta providencia, dictada dentro de una de las piezas separadas, el juez acepta la petición de la Fiscalía de pedir un nuevo informe a la Agencia Tributaria sobre una serie de operaciones realizadas entre la firma Bbats e Innova.

Bbats vendió a Innova productos por un total de 148.955 euros en 2010 "y parece que Innova no habría comunicado a la administración tributaria bienes y servicios" a esta firma, por lo que ve necesario pedir un nuevo informe a Hacienda.