UGT ha valorado los datos del Índice de Precios de Consumo (IPC) con "preocupación", puesto que la caída de los precios, aún mayor en la Región de Murcia, "mantiene el IPC, en su tasa anual, sin registros superiores al cero por ciento desde hace prácticamente dos años, con la única salvedad de abril de 2014".

"Si bien es cierto que la bajada de los precios de carburantes y lubricantes tiene una gran influencia en esta caída, no menos cierto es que, con carácter general, la inflación se sitúa en todos los grupos en niveles muy bajos impropios de una fase económica expansiva", según informaron fuentes del sindicato en un comunicado.

A su juicio, esta "acentuada moderación" de los precios "ha sido durante la crisis un claro indicador de la falta de actividad económica y, especialmente, de las devaluaciones salariales, en tanto que los salarios son una variable que influye al mismo tiempo en la conformación de los precios y en la demanda interna".

Pero ahora que se da por "superada" la crisis, UGT ve que los precios "siguen instalados en esa tendencia bajista, lo que para nosotros significa que ni la actividad económica ni el consumo se han reactivado con la suficiente fortaleza". Y en ello, lamenta, "los salarios tienen un papel primordial que es preciso potenciar".

El sindicato señala que la reforma laboral, por la "precariedad creciente" que ha traído consigo y por sus "negativas consecuencias sobre la negociación colectiva", está "entorpeciendo un crecimiento de los salarios que no sólo es preciso para redistribuir más equitativamente la renta en un país donde la de los asalariados lleva años perdiendo terreno al tiempo que crecen los beneficios empresariales".

Esa subida "también es imprescindible para sostener el consumo, y en consecuencia, la actividad económica", según valora UGT.

Por todo ello, UGT aboga por la conformación de un Gobierno estatal que, cuanto antes, "empiece a trabajar por afianzar el crecimiento económico sobre bases más sólidas y estables y a combatir la desigualdad que han generado las políticas de recorte de protección social y las que, en el ámbito laboral, han cercenado derechos y garantías salariales a los trabajadores".

Al mismo tiempo, sigue insistiendo en que el Gobierno regional "debe abrir sin cortapisas el diálogo social, para redefinir sus políticas de desarrollo económico, de empleo y política social a la búsqueda de un crecimiento más sostenible e integrador que genere empleo estable y de calidad en la Región de Murcia".