La Fiscalía de Ceuta ha decidido archivar las diligencias de investigación abiertas contra el presidente de la Unión de Comunidades Islámicas de la ciudad autónoma (Ucidce), Laarbi Maateis, a instancias de la Delegación del Gobierno, el Ejecutivo autonómico y dos asociaciones después de que el líder musulmán cuestionase públicamente la Ley contra la Violencia de Género por "crear más odio que solucionar los problemas de la pareja".

En su resolución, a cuyo contenido ha tenido acceso Europa Press, el Ministerio Público opina que se trata de "una crítica de un representante de una asociación a la ley considerando conveniente no acudir de forma inmediata a la Policía pues ello implicaría la definitiva disolución del matrimonio, que ya no habría forma de reconciliarlo".

Desde su punto de vista, tales manifestaciones "pueden resultar anacrónicas o impropias" pero "carecen de relevancia penal, pues para ser típicas deben incentivar 'actitudes de auténtica hostilidad', exigiendo un componente de agresividad en el discurso incompatible con la libertad de opinión y de expresión, de tal forma que la generación directa de actitudes hostiles en los receptores del mensaje constituya la 'antesala de la violencia', lo que no ocurre en este caso".

La Delegación del Gobierno, la Ciudad Autónoma, Mujeres Progresistas y Búscome creyeron ver en las palabras de Maateis una "incitación directa o indirecta al odio, hostilidad, discriminación o violencia ", en los dos primeros casos, y una "apología de la violencia de género".

Para la Fiscalía, sin embargo, no cabe apreciar en las declaraciones "un peligro real y próximo, no solo remoto o posible de generación de hechos violentos o discriminatorios contra el grupo al que se incita al odio, la que permite la obligada interpretación restrictiva del tipo".

Según refiere, el Constitucional también ha establecido en su jurisprudencia que debe apreciarse "un componente de agresividad en el discurso incompatible con la libertad de opinión y de expresión", de tal forma que la generación directa de actitudes hostiles en los receptores del mensaje constituya la "antesala de la violencia".

Las declaraciones de Maateis quedan contextualizadas "dentro de la legítima posibilidad de expresar las propias ideas" y en que "el Derecho Penal no debe reprimir el germen de una intención" porque ese derecho fundamental de libre expresión ampara en España incluso manifestaciones que "contraríen, choquen o inquieten al Estado o a una parte cualquiera de la población".

El presidente de la Ucidce declaró en sede judicial que "bajo ningún concepto" ampara "ni el maltrato psíquico ni el físico a la mujer", aunque mantuvo que, según su criterio, las parejas no deberían "denunciar a la Policía o al Juzgado cualquier discusión que tengan" sin antes "ponerse en manos de sus familias o mediadores para intentar resolver sus diferencias si es posible".

"Una cosa radicalmente distinta es si hablamos de violencia, en cuyo caso hay que ir directamente a los tribunales sin esperar nada", precisó. "Yo hablo desde un punto de vista religioso perfectamente compatible con el marco constitucional y legal que tenemos que respetar, y lo que digo es que el Islam no apoya ni el machismo ni la violencia sobre la mujer, que, de hecho, está en lo más alto de la jurisprudencia islámica", aclaró en declaraciones a Europa Press tras el estallido de la polémica.