El portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, ha exigido "un cambio de actitud y en la planificación de los Plenos por parte del gobierno del socialista Juan Espadas, para que no se vuelvan a repetir "atropellos a la democracia como el vivido en el pasado Pleno de aprobación inicial del Presupuesto para 2016, cuando ni siquiera permitió que se votaran las enmiendas presentadas por el PP y por Participa Sevilla".

A través de un comunicado, Zoido señala que, tanto el Pleno de las ordenanzas fiscales como el del Presupuesto estuvieron presididos por la "improvisación y el caos", pero considera "especialmente intolerable" que Espadas "quiera silenciar la opinión de algunos grupos sólo por el mero hecho de que no apoyaran su presupuesto".

Zoido ha señalado que está esperando que la presidenta del Pleno, Carmen Castreño, explique los motivos por los que impidió que se votaran sus enmiendas y las de Participa Sevilla, "cuando existe un informe del interventor que lo avala".

"Así se lo solicitamos por escrito el pasado viernes, porque no encontramos ningún argumento jurídico en contra, puesto que el informe dice que son técnicamente posibles y por lo tanto no hay nada que impida su debate, más allá de una decisión arbitraria y caprichosa", incide.

El portavoz popular ha indicado que "no se puede presumir de diálogo y consenso en la elaboración del Presupuesto y después tratar de callar la opinión de quien no está de acuerdo con él". "Creo que es muy significativo que todos los grupos políticos representados en el Pleno, independientemente del sentido de su voto, criticaran con dureza la actitud de Espadas, con términos como atentado democrático, vergonzoso o chapuza, por lo que debe reflexionar sobre ello", añade.

Zoido ha señalado que el Pleno de ordenanzas fue "caótico" porque se votaron de manera "individual y con enmiendas sobre las enmiendas por ausencia de planificación". En ese momento, recuerda que Espadas se comprometió a que "no volvería a pasar", pero que el Pleno de presupuesto ha sido "aún peor, porque además se ha cambiado radicalmente el criterio respecto a la votación de uno a otro sin que medie argumentación legal o reglamentaria para ello".

"La manera de evitar el descontrol es planificando con tiempo el desarrollo del Pleno en las juntas de portavoces, que para eso están, y no dando bandazos y silenciando a quienes no piensan como él", recalca.