El Observatorio Español contra la LGBTfobia ha criticado este lunes la "hipocresía" del arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, al respaldar al sacerdote del municipio sevillano de Écija que prohibió a un hombre homosexual que vive con su pareja ejercer como padrino de bautizo de su sobrino, declarando que "no se le impide ser padrino por ser homosexual, sino por llevar una vida no congruente con la fe".

Así lo ha trasladado el Observatorio en un comunicado, en el que apunta que "con estupor" han visto como Asenjo "veta a un hombre homosexual ser padrino en el bautizo de su sobrino no por ser homosexual, sino más bien por ejercerlo, lo que hace la inmensa mayoría de los hombres homosexuales". En esta misma línea, añade que "es casi como si nos impidiera ir a la iglesia no por ser negro, sino por tener la piel oscura".

El director del Observatorio contra la LGBTfobia, Francisco Ramírez, ha apuntado que "se trata de una clara discriminación por motivos de orientación sexual, ya que el arzobispo hispalense pide que todos los homosexuales seamos 'castos' para ser 'aptos', algo que no se pide en cambio a los heterosexuales". "Esto convierte a los homosexuales, sin duda, en feligreses de segunda categoría", lamenta.

Ramírez explica que en el artículo 874 del Código Canónigo se aduce que para ser padrino hay que "llevar una vida congruente con la fe y la misión que va a asumir", algo que, según el director del Observatorio, "es algo bastante subjetivo", y prueba de ello es que "muchos homosexuales, que mantienen relaciones, ejercen como padrinos, y de que este hombre homosexual ya lo había sido en dos ocasiones anteriores".

El director asegura que "llevar una vida congruente con la fe es seguir simplemente el mensaje del Evangelio", y con estas "prohibiciones caducas y fundamentalistas" lo único que se consigue es "mantener la sangría de feligreses y mantener a la Iglesia Católica desfasada en el tiempo respecto a la sociedad en la que vive".

Ramírez se pregunta con toda esta situación dónde está "esa nueva Iglesia moderna e inclusiva que habla sobre el acogimiento de las personas homosexuales en el seno de la misma", al mismo tiempo que se pregunta si la diferencia que existe con la Iglesia de hace años es que "ya no se nos insulta y acosa desde los púlpitos, que no se nos expulsa de escuelas y seminarios, o incluso que no se nos lapida o incita al asesinato como desde otras religiones".

Asimismo, el Observatorio ha pedido al arzobispo de Sevilla que "reflexione seriamente sobre el acogimiento de homosexuales en la iglesia, y que termine de una vez de considerar una visión fundamentalista sobre la moral cristiana y que siga el verdadero mensaje del Evangelio de caridad y piedad, donde todos los hombres somos iguales".

"humillación y sufrimiento"

El director del Observatorio ha pedido que, además, Asenjo debe reflexionar sobre "la humillación y el sufrimiento que sus feligreses homosexuales viven diariamente con concepciones discriminatorias y simplistas de la sexualidad". "Es discriminatorio que se pida llevar una vida en castidad simplemente por tener una orientación sexual diferente a la mayoritaria".

Ramírez ha apuntado que pese a estas peticiones, "no se puede esperar gran cosa del arzobispo de Sevilla, puesto que, repasando hemeroteca, éste ya declaró en varias ocasiones que considera la homosexualidad como "un desorden moral y un pecado", tal y como hizo en 2012 tras declarar su homosexualidad el sacerdote José Mantero; mientras que en 2005, Asenjo declaró que el matrimonio entre personas del mismo sexo "afectaría negativamente a la familia y a los menores adoptados" y que considera "un abuso" extender el concepto de matrimonio a las uniones homosexuales.

El director del Observatorio ha calificado de "desfachatez", que el arzobispo declarase en 2012 que "los homosexuales son hijos de Dios y son hermanos míos y la iglesia los acoge", algo que, a su juicio, "no tardó mucho en desdecirse de esas palabras al obligar a los dominicos de la Iglesia de Santa María la Real a cancelar una 'Vigilia de Oración para un mundo sin Homofobia', y a prohibir a todas las parroquias de la Archidiósesis de Sevilla que acojan tales actos, que tuvo que realizarse en otro lugar finalmente con gran éxito de público".

Con todo ello, Ramírez ha hecho un llamamiento al papa Francisco para que "reconduzca" esta situación, y que "aclare si sus afirmaciones sobre el acogimiento de homosexuales, sólo es una estrategia de marketing social de cara a la galería". "Estamos abiertos a dialogar con el arzobispo de Sevilla con sinceridad y con espíritu de cordialidad y entendimiento", concluye.

Denuncia desde ugt-MADRID

Por otro lado, cabe recordar que el pasado jueves, UGT Madrid hizo público la denuncia de que un trabajador y delegado sindical de la organización había recibido un trato "discriminatorio" y "vejatorio" por parte de un párroco de Écija, quien le ha negado ser padrino de su sobrino por su condición sexual.

Así lo expuso la secretaria de Igualdad de UGT Madrid, Ana Sánchez de la Coba, para referirse al caso de Salvador A. C., delegado sindical de 40 años y trabajador en el sector de la restauración que se enteró de la negativa del párroco a poder participar en el bautizo como padrino.