La empresa Río Narcea Recursos S.A. que opera en la Mina de Aguablanca en Monesterio ha asegurado que mantiene "plena disposición al diálogo" con los trabajadores para que el cese de la explotación, sobre el cual asegura que no hay "marcha atrás", se produzca "del mejor modo para todas las partes".

En este sentido, la compañía ha manifestado su disposición a valorar las contrapropuestas que le lleguen de los representantes de los trabajadores, si bien aclara que por el momento no ha recibido "ninguna", al tiempo que ha recordado que el proceso de negociación del ERE que afecta a 163 trabajadores finaliza el próximo 12 de marzo, sin que exista "posibilidad alguna" de ampliación según la legislación vigente.

A través de un comunicado, la empresa aclara que la decisión de la finalización de las operaciones de la mina Aguablanca "no tiene marcha atrás", a la vez que desmiente "rotundamente" las declaraciones vertidas en medios de comunicación por algunas organizaciones sindicales con respecto a que "no se trata de un cierre de explotación sino de despido de trabajadores".

Así, Río Narcea Recursos asegura que "no cesa en su esfuerzo por encontrar el camino de entendimiento" con los representantes de los trabajadores afectados por el ERE. La compañía "seguirá trabajando, abierta al diálogo, y poniendo todo de su parte para avanzar en el proceso de negociación", añade.

Como prueba de este "afán por avanzar" resalta la propuesta que en este momento Río Narcea Recursos ha puesto encima de la mesa, que "garantiza una indemnización para los trabajadores de 30 días por año trabajado y supone un significativo avance frente a la oferta anterior".

Además, la compañía ha manifestado su disposición a "hablar de cuantas contrapropuestas estimen oportunas los representantes de los trabajadores, sin que hasta la fecha haya recibido ninguna por parte de estos".

A su vez, insiste en que el cese de operaciones vino causado por "la inviabilidad de la explotación en subterráneo" de Aguablanca ante la "continua bajada del precio de los metales, que hubiera generado pérdidas por valor de más de 100 millones de euros".

Una "muestra más de la buena fe" con la que Río Narcea está actuando ha sido la solicitud de "un mediador que garantice la transparencia y ayude a ambas partes a alcanzar un acuerdo". También ha mostrado a los representantes de los trabajadores su "deseo de reunirse con mayor frecuencia, en aras de aumentar las posibilidades de llegar a un acuerdo".

Con este fin, concluye el comunicado, la empresa ha propuesto que la próxima semana se celebren al menos dos nuevos encuentros entre las partes.