La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a trece años de prisión a un hombre de 36 años acusado de matar a su madre, notaria de profesión, asfixiándola y golpeándola con un jarrón de porcelana en su domicilio, un chalet en el barrio madrileño de Puerta de Hierro el 1 de julio de 2012.

El tribunal descarta en la sentencia la versión del condenado de que los autores fueron unos asaltantes de una banda que entraron el domicilio, en un chalet con jardín, y recuerda que la víctima le había declarado heredero de sus bienes. La resolución impone dicha pena a Ramón María S.L. por la comisión de un delito consumado de homicidio con la concurrencia de la agravante de parentesco tras haber sido declarado culpable en el juicio con jurado que se celebró en la Audiencia de Madrid el mes pasado.

El tribunal declara probado que sobre las once de la noche del día referido la madre del condenado se encontraba en su casa donde fue objeto de la agresión, sufriendo traumatismos con heridas que le originaron abundante sangrado. Además, sufrió una presión fuerte sobre boca y nariz con una almohada, un cojín y las manos del agresor para impedir que respirara, todo lo cual le produjo la muerte. La sentencia recuerda que el padre del acusado declaró en el juicio que su esposa dejó testamento en el que designaba a su hijo heredero universal de todos sus bienes si bien le dejaba a él el usufructo.

Admitió que su difunta mujer tenía bienes privativos cuya propiedad está ya inscrita a nombre de su hijo, así como los bienes que correspondían a la liquidación de la sociedad de gananciales. El tribunal comenta que "cabe presumir" que era "sustanciosa atendiendo al signo externo de riqueza que revela el nivel del chalet en el que ocurrieron los hechos y los honorarios profesionales de su condición de notario"