El pleno del Ayuntamiento de Salamanca ha aprobado definitivamente las ordenanzas fiscales para el próximo año 2016; unas tasas, precios públicos y tarifas que han contado con la incorporación de algunas alegaciones frente al documento inicial presentado por el equipo de Gobierno.

Según ha explicado el concejal de Economía y Hacienda, Fernando Rodríguez, las modificaciones añadidas contemplan la puesta en marcha de un nuevo bono mensual en el transporte público para jóvenes, la reducción en un 50 por ciento en la tasa por la celebración de matrimonios civiles para familias con escasos recursos o la posibilidad de firmar convenios con clubes para una bajada de precios en el alquiler de instalaciones en la ciudad deportiva de La Aldehuela, entre otras.

Durante el turno de intervenciones, el portavoz del Grupo de Ciudadanos, Alejandro González, ha mostrado su satisfacción por la incorporación de alegaciones dentro de unas ordenanzas que "no subirán en 2016".

Por su parte, el concejal de Ganemos, Gabriel Risco, ha destacado la incorporación de alegaciones que "mejoran el acceso de la ciudadanía a los servicios municipales" pero ha insistido en ordenanzas con las que los ediles de su grupo no están de acuerdo, como el precio público del suministro de agua, con el que el Ayuntamiento "hace negocio" con un servicio "esencial y básico".

Asimismo, Risco ha remarcado que el pago por el agua tiene que dejar de ser un precio público y pasar a ser una tasa para que no haya "una auténtico confiscación del dinero de los ciudadanos" y que los usuarios, en este ámbito, "solo se pague el coste del servicio", lo que supondría "un ahorro importante para las familias".

Finalmente, el portavoz del Grupo Socialista, Juan José Mateos, más allá de su apoyo a las alegaciones que se han incorporado al texto, ha criticado que las ordenanzas en su conjunto "llevan una subida de impuestos encubierta".

El edil del PSOE ha resaltado que el IPC ha sido negativo, en el momento que habitualmente se toma como referencia, y que el equipo del Gobierno lo que ha hecho no ha sido bajar los precios sino "congelarlos".