Estaba aparcado el viernes en el paseo Zorrilla, 76, junto a la calle Magallanes. Tenía roto el retrovisor, una ventana bajada y una garrafa similar a las de combustible en el asiento del conductor. Una ciudadana alertó a la Policía y los perros de los Tedax descartaron que pudiera ser un coche bomba. Eso sí, al cortar parte de la calle se formó un gran revuelo.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios