Ecologistas en Acción ha pedido al Ayuntamiento de Valladolid que adopte medidas vinculantes de reducción del tráfico motorizado ante los "elevados" índices de niveles de dióxido de nitrógeno y partículas.

El anticiclón instalado sobre la Península Ibérica desde el inicio de la semana, el "intenso" tráfico motorizado que soporta la ciudad y su entorno y el incremento del consumo de combustibles fósiles por el mayor uso de la calefacción han provocado que en la tarde de ayer se hayan disparado los niveles de dióxido de nitrógeno y partículas.

En la estación de control de la contaminación de Arco de Ladrillo se superaron a las 20.00 horas de este jueves los límites de dióxido de nitrógeno, al alcanzar 207 microgramos por metro cúbico, por encima de los 200 permitidos por la normativa.

No obstante, "lo más preocupante" es la situación en la ciudad de los niveles de partículas, contaminante más peligroso cuyo valor límite diario, establecido en 50 microgramos por metro cúbico, se viene superando desde el miércoles en las estaciones de control de Arco de Ladrillo, La Rubia y Vega Sicilia, las dos últimas en las proximidades del Paseo de Zorrilla, alcanzando un máximo de 62 microgramos por metro cúbico en la estación de Vega Sicilia.

De esta manera, Valladolid se suma a la treintena de ciudades grandes y medias que a lo largo de la semana está incumpliendo los límites legales de contaminación atmosférica por dióxido de nitrógeno y sobre todo por partículas, afectando a alrededor de 20 millones de personas en España.

En el caso de Valladolid, el Ayuntamiento pidió ayer a los ciudadanos que prescindieran del vehículo privado voluntariamente, lo que en opinión de Ecologistas en Acción no es suficiente para impedir el incumplimiento legal y preservar la salud pública según afirma esta formación en un comunicado recogido por Europa Press.

Por ello, Ecologistas en Acción ha advertido a las personas más sensibles a la contaminación atmosférica, tales como niños, ancianos, mujeres gestantes o personas con problemas respiratorios o cardiovasculares, de que se protejan evitando la exposición al aire libre a la caída de la tarde.