Un año después de que un mosso d’esquadra embistiera con un furgón policial a un motorista causándole la muerte en un cruce, el juez ha impuesto una multa de 300 euros al agente y una indemnización de 67.600 euros a la familia del fallecido. La sentencia concluye que el mosso no actuó con «diligencia extrema» y corrobora que rebasar un semáforo en rojo con las luces de emergencia está permitido a un furgón policial. La sentencia señala también que el motorista no pudo reaccionar adecuadamente porque triplicaba la tasa de alcoholemia. El accidente se produjo en la confluencia de las calles Ausiàs March y Roger de Flor, cuando el vehículo policial se dirigía, de emergencia, a reforzar el dispositivo de una manifestación vecinal en contra de la narcosala de la Vall d’Hebron.