Tráfico deja colgados hasta septiembre a más de mil sevillanos

800 coches de autoescuela se manifestaron ayer por la falta de examinadores. Los que hay no quieren hacer horas extra ni tardes.
María, una joven madre con tres niños pequeños, se apuntó en junio a una autoescuela. Hizo un curso intensivo y el pasado 10 de julio se examinó del teórico. Tras aprobar, le dijeron que no se podrá examinar del práctico hasta finales de septiembre por falta de examinadores. No es la única a la que Tráfico ha dejado colgada. Delante de María, más de 1.000 sevillanos están en lista de espera para pasar la prueba práctica del coche.El colapso que sufren estos exámenes ha generado un conflicto entre Tráfico, las autoescuelas y los examinadores. Para intentar solucionar la situación, José Luis León, jefe provincial de Tráfico, recogió ayer en el aeropuerto de Sevilla al director de la Asociación Nacional de Autoescuelas, José Miguel Báez, para charlar minutos antes de que Báez se entrevistara con los medios y acudiera a la segunda manifestación, en la que participaron unos 800 coches, convocada este mes para presionar para la búsqueda de soluciones.

De San Pablo a Reina Mercedes no hubo acuerdo. Tráfico les ha impuesto a las autoescuelas que este mes cada profesor presente a examen a un 25% menos de alumnos por convocatoria (tres en vez de cuatro). Y que emplace a los restantes para septiembre, fecha en la que se incorporan tres nuevos examinadores. Las autoescuelas piden un calendario fijo de exámenes, poder examinar cada semana (ahora lo hacen cada ocho ó diez días) y reducir de siete a cinco los grupos de alumnos.

Quieren privatizar los exámenes

José Miguel Báez, presidente de la Asociación Nacional de Autoescuelas, intervendrá hoy en la Comisión Vial del Congreso de los Diputados para pedir a los estamentos oficiales la privatización de los exámenes de conducir, una práctica que se lleva a cabo con éxito en el 70% de los países europeos, tal y como ocurre en Alemania y Holanda.

Las dos partes

Autoescuelas. Se quejan de perder dinero. Al no existir una fecha fija para examinarse, los alumnos suspenden o aplazan las clases prácticas. «Si un profesor daba 20 clases al día, ahora da 8», dicen en la autoescuela Heliópolis.

Examinadores. Hay 42, aunque sólo unos 33 trabajan cada día. Se niegan a hacer horas extra y a trabajar por la tarde. Ahora examinan a 16 alumnos cada día, dos más que en el resto del año.

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