¿Cuánto puede llegar a pagarse por alquilar una vivienda en España y, más concretamente, en una ciudad tan de moda como Barcelona? No hay registros con los que comparar, pero seguro que un alquiler de 35.000 euros al mes por un ático de 500 metros cuadrados y 300 de terraza en el paseo de Gracia es realmente un precio de récord.

Eso es lo que va a pagar un miembro de una familia real de Oriente Medio, empeñado en tener casa en la Ciudad Condal. La agencia Prestige Barcelona, de la Red inmobiliaria de ColdwellBanker España, ha tramitado esta llamativa operación y considera que es "la mayor operación de alquiler a largo plazo de la ciudad de Barcelona".

Este ático del paseo de Gracia, una de las zonas más caras de la Ciudad Condal, está tasado en un precio de venta de 12 millones de euros. Es un buen ejemplo de que Barcelona es un destino de enorme interés para los extranjeros interesados en residencias de lujo. Según esta inmobiliaria internacional, en 2014, el 90% de las viviendas con un valor por encima del millón de euros habían sido adquiridos en los últimos tres años por clientes de otros países.

La bajada de precios por la crisis internacional afectó menos y más tarde a las viviendas más caras, pero también. Según datos de ColdwellBanker, los precios de las residencias de lujo han caído entre un 25 y un 40% al estallar la burbuja inmobiliaria.

Hasta hace unos años, las viviendas de lujo en España eran objeto de deseo de inversores de origen europeo y de los países nórdicos; Francia, Inglaterra y Suiza eran los principales clientes. Con la crisis, las cosas han cambiado y al mercado han llegado inversores de Europa del Este, americanos y asiáticos. En todo caso, casi siempre se trata de una persona sin problemas de financiación que suele optar por la compra y que busca obtener rentabilidad con la operación.