Diputación de Valladolid ayudará con 37.200 euros a farmacias rurales menos viables para implantar la receta electrónica

El Colegio de Farmacéuticos de Valladolid espera que todas las oficinas completen su equipamiento tecnológico antes de que acabe enero

La Diputación de Valladolid ayudará con 37.200 euros a 32 farmacias rurales de la provincia en situación de viabilidad económica comprometida para que puedan adquirir el equipamiento informático necesario para implantar el sistema de receta electrónica.

Así consta en el convenio firmado este miércoles en el Palacio de Pimentel, sede de la Institución provincial, entre el presidente de la misma, Jesús Julio Carnero, y el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valladolid, Juan de Dios Jódar.

De las 287 oficinas de farmacia existentes en la provincia, 88 se encuentran en el medio rural y, de ellas, las 32 en situación económica más comprometida se beneficiarán de esta ayuda que rondará los mil euros para cada una y que se dedicará de forma casi exclusiva a este fin.

En declaraciones recogidas por Europa Press, Jódar ha explicado que, en función del grado de equipamiento tecnológico de partida, el desembolso a que deben hacer frente puede oscilar entre los 1.000 y los 5.000 euros, a lo que hay que sumar unos gastos de red de 600 euros mensuales.

En este sentido, Jódar ha destacado que, merced a la negociación mantenida por el Colegio con las empresas de telecomunicaciones, el coste será "igual" tanto para la farmacia rural que recibe la señal vía satélite, como para la urbana conectada por cable de fibra óptica, por lo que su presidente ha defendido que se trata de una "economía de escala y solidaria".

Implantación del sistema

Juan de Dios Jódar ha señalado que hasta ayer había 25 farmacias ya listas para el sistema de receta electrónica, a las que se han sumado otras ocho de la zona de Tordesillas, mientras que para este jueves se prevé la implantación en otras cuatro de la zona de Alaejos.

Así, el presidente de los farmacéuticos vallisoletanos ha reconocido que el objetivo es que para finales de enero de 2016 ya estén acondicionadas todas los despachos, de manera que en el primer trimestre del nuevo año el sistema esté ya en funcionamiento, tras lo que ha admitido que la opinión de los profesionales sobre la implantación del sistema es "positiva".

Asimismo, Jódar ha resaltado la difícil situación de muchas de estas farmacias rurales, ya que "en muchos casos cubren municipios de menos de 200 habitantes" cuando el umbral de rentabilidad se sitúa "a partir de 700 ó 1.000".

Por ello, el presidente del Colegio ha agradecido la "sensiblidad" de la Diputación hacia las farmacias "más modestas", mientras que Jesús Julio Carnero ha agradecido la presencia de los farmacéuticos en el medio rural, para los que ha empleado el término tradicional de boticarios y ha recordado que son "los únicos profesionales sanitarios con presencia permanente en estos pueblos".

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