La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha calificado hoy de "gran noticia" el hecho de que por fin, frente a los fracasos cosechados en septiembre de 2014 y agosto de 2015, los grandes partidos políticos se hayan puesto de acuerdo en defender la unidad de España contra el independentismo catalán en lo que no ha dudado en calificar como "cuestión de Estado, más allá de cualquier interés partidista e ideológica".

La defensa de la unidad del país ha sido precisamente una constante durante la celebración en Valladolid del Comité Ejecutivo del PP de Castilla y León, reunión que constituye el "punto de partida", como así la ha calificado el presidente autonómico, Juan Vicente Herrera, del trabajo que deberán afrontar los 'populares' castellanoleoneses de cara a las Elecciones Generales del 20 de diciembre.

En su intervención que cerraba el cónclave, que ha estado precedido por la alocución de citado Herrera, De Cospedal ha realizado constantes alusiones al proceso secesionista iniciado en Cataluña, si bien se ha mostrado esperanzada de que el llamamiento a la unidad realizada por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha calado en el resto de grandes partidos, tal y como se puso de manifiesto el pasado miércoles en su encuentro con el líder socialista, Pedro Sánchez, y que confía en que se escenifique en las próximas reuniones previstas con otras formaciones.

Defensa del modelo autonómico

"Hemos pedido unidad y hoy parece que va a ser posible. Es una gran noticia, una oportunidad que no podemos desaprovechar porque los españoles necesitan de todos los partidos, ya que esa unidad está por encima de cualquier ideología, eslogan, operación de marketing o radicalismo", ha insistido la dirigente 'popular' castellanomanchega, quien ha aprovechado igualmente para defender el actual modelo autonómico, "que se sostiene pero administrado sin despilfarros y teniendo al ciudadano como principal referencia".

Al respecto, De Cospedal ha censurado a aquellos que pretenden romperlo "por la puerta de atrás", precisamente cuando se pone en juego algo que "es de todos y exige la decisión de todos", y en este sentido, entre los aplausos de los integrantes del Comité Ejecutivo Regional, ha acusado a la Generalitat de dedicarse a embarcar a sus ciudadanos en "aventuras sin sentido que sólo traen frustración, separación y ponen en riesgo la unidad de España".

Por ello, ha invitado a la Generalitat a abandonar sus veleidades independentistas y, en cambio, se dedique a pagar los medicamentos de todos los catalanes, después de que el Servicio de Salud catalán comunicara a los farmacéuticos la imposibilidad de pagar los medicamentos, incrementando así la deuda en 330 millones, hasta recibir alguna financiación extraordinaria.

"un pufo de 30.000 MILLONES"

A lo largo de su intervención, iniciada con loas tanto al PP de Castilla y León como a su presidente, de los que ha asegurado que son un "referente" para el partido a nivel nacional, la secretaria general ha realizado igualmente una encendida defensa de la política desarrollada por el Gobierno de Rajoy desde 2011, con logros que, según ha subrayado, permiten reivindicar que los españoles "han estado a la altura de las circunstancias", en referencia a que se logró "pasar de la recesión al crecimiento, de la destrucción a la creación de empleo y del temor a la pérdida de la sociedad del bienestar a su blindaje".

De Cospedal se ha referido a la Ley de Presupuestos Generales del Estado como ejemplo de ese compromiso y responsabilidad del Gobierno del PP, frente a un anterior gobierno socialista que en 2011 optó por anticipar las elecciones, sin presentar dicho instrumento político y jurídico, "porque lo que quería es que el Partido Popular fuera el que pidiera el rescate y para que no quedara constancia de que, junto al déficit, dejaba a todos los españoles un pufo de 30.000 millones de euros".

Sin embargo, la dirigente del PP ha enfatizado que la postura entonces de Rajoy fue que "los españoles se rescataran a sí mismos", logró que, como así ha apostillado, se ha conseguido sobre los pilares del "empleo", donde se ha pasado de la destrucción de 1.340 empleos diarios en 2011 a la creación de 1.392 cada día en 2015; la "confianza", tanto en un sistema sanitario público, tras pagar la deuda sanitaria de 16.000 millones dejada por los socialistas y garantizar el acceso a una tarjeta a 800.000 personas que antes carecían de ella, así como en un sistema de pensiones presente y de futuro, sin los recortes del anterior gobierno, y en otros campos como la educación y la Ley de Dependencia.