Agentes de la Policía Nacional, adscritos a la Jefatura Superior de Policía de La Rioja, procedieron el pasado 14 de octubre a la detención de un hombre y tres mujeres entre los 21 y 37 años de edad, de nacionalidad rumana y residentes fuera de nuestra Comunidad, con múltiples antecedentes policiales por delitos contra el patrimonio, como presuntos autores de la sustracción de prendas, en diversos comercios de ropa y calzado de Logroño.

Los detenidos fueron detectados en el transcurso de un dispositivo desarrollado por agentes de esta Jefatura Superior, en Prevención de hurtos y robos en zonas comerciales de la ciudad, cuando, por su actitud, parecían estar dedicándose a este tipo de hechos contra el patrimonio.

A partir de ahí, se dispuso una vigilancia estrecha sobre los mismos, pudiendo comprobar que el grupo estaba compuesto por cuatro personas, un hombre y tres mujeres, que a su vez se repartían en grupos de dos elementos, llegando incluso a actuar de forma individual, accediendo a los establecimientos de las zonas comerciales de nuestra ciudad, con el fin de perpetrar la sustracción de artículos, mientras que el resto, esperaban en un vehículo estacionado en las inmediaciones, donde depositaban la mercancía robada o realizando labores de vigilancia, con el fin de detectar la presencia de agentes policiales en los alrededores.

Una vez producida la detención de los integrantes del grupo, se incautaron los efectos que portaban, así como numerosos efectos sustraídos en el interior del vehículo, procedentes de diversos establecimientos de la ciudad, siendo trasladados a dependencias de la Jefatura Superior de Policía para la elaboración del correspondiente atestado.

El valor de las prendas sustraídas en los diferentes centros comerciales, podría alcanzar los 6.500 euros.

Viajaban por el territorio nacional

Por las investigaciones practicadas se ha podido demostrar, que forman parte de un Grupo organizado "itinerante", especializado en este tipo de delitos contra el patrimonio, que se dedicaria a viajar por diferentes puntos del territorio nacional, para llevar a cabo las sustracciones, las últimas, realizadas entre el 5 y 9 de octubre en las localidades asturianas de Gijón y Oviedo.

De hecho, dos de estas personas aún tenían vigente una detención y personación por actividades similares, dictadas por la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Asturias.

El "modus operandi" utilizado por estos grupos, es sustraer productos de diferentes comercios y que el valor de lo sustraído en cada establecimiento, sea inferior al que se establece la Ley para que el hecho sea constitutivo de un delito leve (antigua falta), al objeto de que si son descubiertos al pasar la línea de cajas o el arco de seguridad, las penas impuestas sean inferiores al delito grave y no puedan ser detenidos.

La dificultad para los investigadores policiales, es la localización de todos los integrantes del Grupo, así como el lugar donde almacenan los efectos procedentes de su continuada actividad delictiva, siendo este el objetivo principal, ya que en caso de ser hallado por los agentes, la gravedad de los hechos es mucho mayor, siendo condenados en estos casos por delito de mayor gravedad, además de poder proceder los agentes a su detención.

El servicio se enmarca dentro del dispostivo establecido por parte de la Jefatura Superior de la Rioja y desarrollado por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Brigada Provincial de Policía Judicial, para la Prevención de Hurtos en establecimientos Comerciales de la ciudad, así como parte del Plan para la Prevención e Investigación de la Delincuencia Itinerante.

Los detenidos, junto las diligencias policiales, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción, en funciones de Guardia, quien decretó su libertad con cargos.