El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha asegurado que Cruz Roja va a jugar un "papel importante" en la acogida de los refugiados que lleguen a la Comunidad.

Así lo ha afirmado al término de la reunión que ha mantenido este miércoles con el nuevo presidente regional de la institución, Javier Fernández, con quien ha analizado la situación de la organización y los proyectos en los que trabaja en la actualidad.

Revilla, que ve con buenos ojos que exista respecto a la acogida de refugiados una "corresponsabilidad de todos" y que la respuesta a este drama no responda a una cuestión de "voluntarismo", espera que el Estado dé a conocer pronto el número exacto que va a recibir Cantabria para empezar cuanto antes a atender a estas personas que están pasando por circunstancias "tremendas".

"No pueden estar todos en un mismo sitio. Lo mejor es que cada comunidad se haga cargo de un número en función de su capacidad, habitantes, etc., y nosotros estamos esperando a que nos den ese número para aceptarles y atenderles", ha dicho Revilla, quien ha recordado además que el Gobierno cántabro ya ha destinado partidas para ayudar a paliar las "calamidades" que están padeciendo.

Por otro lado, ha destacado la labor "extraordinaria" que lleva a cabo Cruz Roja en Cantabria y la "importante colaboración" que presta al Gobierno regional tanto en el ámbito de los servicios sociales como en lo relativo a la vigilancia de playas en temporada estival. Según ha señalado, esa labor goza de la "simpatía, cariño y admiración" no sólo del Ejecutivo, sino del conjunto de la sociedad cántabra.

Finalmente, Revilla se ha comprometido a visitar próximamente las instalaciones de la entidad, que posee centros en Santander, Torrelavega y otros puntos de Cantabria.

Por su parte, Javier Fernández, que ha estado acompañado por la anterior responsable autonómica y presidenta de honor de la institución, Carmen Moreno, ha reiterado la disposición de Cruz Roja de seguir colaborando con el Gobierno en proyectos sociales como el denominado 'Ahora más que nunca', de ayuda a las familias con necesidades, que cuenta con un presupuesto de 500.000 euros y da cobertura a cerca de 5.000 personas.

Cruz Roja en Cantabria dispone para desarrollar su función social con un presupuesto global de seis millones de euros, que se nutre, al margen de los recursos propios que genera, de aportaciones oficiales, de las donaciones que recibe y de las cuotas que abonan los cerca de 15.000 socios que en estos momentos tiene en la región, a los que hay que sumar un número de casi 4.000 voluntarios.