Comisiones Obreras ha resaltado -tras conocer los datos del paro del mes de septiembre en nuestra región- que "los contratos basura para jóvenes en hostelería durante las fiestas riojanas y el inicio de la campaña agrícola maquillan los datos en La Rioja".

En el conjunto del estado, "más parados y parados más pobres. Menos personas trabajando, con peores contratos y menores salarios, esos son los resultados del fracaso de la reforma laboral de 2102 de Mariano Rajoy, Fátima Báñez y el Partido Popular. Menos renta disponible, menor consumo y mayor pobreza, son su reflejo social y económico. El fracaso de las políticas de este gobierno asegura la continuidad de la recesión económica", han continuado.

La realidad para CCOO es que el paro registrado "sube en casi todo el Estado, solo mejoran sus datos este mes aquellas comunidades con amplio sector agrícola como La Rioja con cosechas por recoger, hay más parados y éstos están menos protegidos". La realidad es que "son menos los trabajadores en activo y que éstos, los que aún pueden trabajar, lo hacen con peores contratos y menores salarios: son más pobres". Así, "la incipiente recuperación económica no se traslada a una mejora del empleo".

Cabe recordar que los datos del paro en La Rioja, a fecha de hoy, señalan una disminución de éste en 1.386 personas respecto del pasado mes de agosto.

Obviamente "ello siempre será mejor que un incremento del desempleo. No obstante, deben analizarse sus causas para aprovechar debidamente esa mejora, si efectivamente es cierta, estructural y consolidable. Lamentablemente no es así: se trata, como es sabido, de un dato coyuntural vinculado al mes de septiembre y que no tendrá continuidad sólida en el futuro".

Los datos objetivos "así lo demuestran". En primer lugar, esa disminución del desempleo se centra en dos sectores productivos: servicios con 369 parados menos que el mes pasado, (el 26,62 por ciento de la reducción del paro) y agricultura con 648 parados menos que en agosto,( el 46,75 por ciento de la reducción del paro). Es decir, "el tirón hostelero propio de las fiestas de San Mateo en Logroño y de la miríada de festividades locales propias del mes de septiembre, junto con el inicio de las campañas agrícolas de otoño, han sido la causa de la disminución coyuntural del paro en el mes de septiembre, como es habitual este mes todos los años".

Para CCOO, "si La Rioja disfrutase de una mejor situación estructural que el resto de España, ello se reflejaría marcadamente en los índices estadísticos de contratación y prestaciones, pero no es así: en La Rioja no se hacen más contratos indefinidos que en el resto de España (la proporción es similar, en torno a un 93% de temporalidad)".

"Ni los parados riojanos gozan de mejor protección por desempleo: son 6.118 los beneficiarios de prestación contributiva, 3.985 de subsidio, 1.078 los parados con renta activa de inserción y 119 con el Prepara, un total de 11.300 parados cubiertos, eso es una cobertura social del 57,31 por ciento, casi 5 puntos más que el mes pasado, pero un descenso de 4 puntos desde septiembre del 2014 cuando la tasa de protección estaba en torno al 61,24 por ciento", insisten.

España, y nuestra comunidad, en particular, "siguen encadenadas a un modelo productivo basado en los servicios de bajo valor, con un peso muy bajo y decreciente de las actividades industriales, lo que nos condena a un empleo precario en lo contractual y de bajos salarios, con muchas fluctuaciones estacionales, e insuficiente para dar una oportunidad de empleo a las personas".

Para CCOO, lo más preocupante "es que tanto el Gobierno estatal como el regional se encuentran a gusto con este modelo y es por el que apuestan para salir de la crisis, llevándonos a cometer los mismos errores que en el pasado".

Ante este panorama, "es necesaria una política presupuestaria que fomente el cambio estructural del aparato productivo, que promueva el uso eficiente de los recursos públicos en todos los niveles de la Administración y que ayude a recuperar la demanda interna".

"El objetivo debe ser sacar la economía española de su patrón tradicional de crecimiento de bajo valor añadido, sin industria, empleo inestable y salarios bajos. Para ello hace falta aumentar suficientemente la inversión pública y reorientarla hacia la mejora de la calidad y el contenido tecnológico de las empresas. La injusta rebaja de impuestos promovida por el Gobierno no persigue este fin, sino el rédito político a corto plazo", finalizan.