Endesa ha sustituido un tramo de 240 metros de longitud de cable subterráneo que conecta dos centros de transformación en el barrio de Cappont de Lleida para mejorar el servicio en la zona.

La nueva línea de media tensión, que transcurre entre la avenidas de les Garrigues y València, hará la red más resistente y fiable y la deja preparada para un posible aumento de demanda del consumo, según un comunicado de la compañía de este viernes.

La reforma ha supuesto una inversión de casi 40.300 euros y forma parte del programa de actuaciones que Endesa promueve para la mejora de sus infraestructuras y del suministro eléctrico en la comarca del Segrià.