El Cristo de la Liberación, que el desaparecido obispo de Córdoba Infantes Florido encargó en su día a Aurelio Teno para su propio mausoleo, ha quedado expuesto desde este martes en el muro Oeste del interior de la Catedral de Córdoba.

Según ha informado el Cabildo Catedral de Córdoba, se cumple así el deseo mostrado por la familia del famoso artista cordobés de que dicho crucificado luciera dentro de los muros del principal templo de la provincia. La pieza, que en principio era propiedad del prelado cordobés, fue donada al Cabildo para que pasase a formar parte del tesoro catedralicio.

Mónica Teno, hija del escultor, ha expresado su orgullo porque quede expuesta en la Catedral esta obra, que fue una de las piezas principales de la colección de arte sacro que se expuso en las galerías del Patio de los Naranjos, con ocasión del Año Teno, en que el Cabildo participó dentro del programa de actos organizados con motivo del 775 aniversario de su constitución.