La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha situado este viernes como un reto del sector agroalimentario, uno de los pilares del nuevo modelo productivo, adaptar las tradiciones y la artesanía, "lo que hemos hecho bien durante muchísimos años, a un nuevo mercado que tiene nuevas exigencias y una capacidad de crecimiento importante".

Díaz ha pronunciado estas palabras durante su visita a las instalaciones de Inés Rosales en Huévar del Aljarafe (Sevilla), una gran fábrica de tortas y otros productos artesanos que es un ejemplo, según ha expuesto, de innovación y diversificación, ya que hace 105 años sus productos se vendían en canastos al pie de la carretera y hoy, gracias a las grandes infraestructuras de comunicación, llegan a distintos mercados en 32 países del mundo, incluyendo EEUU, China o Australia.

Inés Rosales ya exporta internacionalmente un 30 por ciento de su producción y el objetivo es elevarlo al 50 por ciento en los dos próximos años. "Eso es lo que queremos en Andalucía, que las empresas ganen tamaño, ganen mercados y vendan fuera de nuestras fronteras, como garantía de que nuestro sistema productivo sea fuerte y que soportemos las crisis en mejores condiciones", ha dicho la presidenta.

Asimismo, ha agradecido la "responsabilidad social" de Inés Rosales y su "compromiso con los trabajadores y el mantenimiento del empleo", ya que "es un buen síntoma que prácticamente el 97 por ciento de esta plantilla sea indefinida y que haya una implicación del personal dentro de la empresa".

"En un momento como éste tenemos que crear empleo de calidad, con salarios dignos y con personal que se motive en el desarrollo de su empresa", según ha dicho Susana Díaz, que ha remarcado que "quienes crean empleo en Andalucía y en España son las empresas y lo que tenemos que hacer las instituciones es ayudar a que ese empleo que se cree sea de calidad".

Para Díaz, Inés Rosales es un ejemplo de la "evolución de algo que se ha hecho bien durante muchos años y que ha entrado en la casa de muchas familias y que hoy es un escaparate también en otros rincones del mundo".

Ha expresado que le encanta ver cómo un producto que se asociaba al desayuno o a la merienda, como la torta, hoy forma parte del menú de grandes cocineros andaluces y de la carta de tapas de bastantes establecimiento, un ejemplo "de diversificación y de innovación y de conseguir que los productos tradicionales tengan una capacidad de crecimiento importante".

Por su parte, el presidente de la empresa, Juan Moreno ha indicado que Inés Rosales ha sido capaz de aunar dos conceptos aparentemente contradictorios como son tradición e innovación. Ha señalado que esa tradición es muy valorada actualmente en los mercados internacionales, junto a que se trata de productos muy saludables.

Inés Rosales tiene unas ventas anuales de unos 14 millones de euros y sus productos llegan a mercados de más de 30 países de los cinco continentes.