LA Agencia de Control Alimentario anuncia una campaña de inspecciones y sanciones en el sector de la aceituna de verdeo

El director de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, José Miguel Herrero, anunció en su intervención en la XXXIII Jornada de Aceituna de Mesa de Asaja-Sevilla que va a poner en marcha en el sector del verdeo una campaña de inspecciones y sanciones con una finalidad disuasoria y para "poner coto a esta mala praxis que vulnera la Ley de Mejora de la Cadena Alimentaria".

El director de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, José Miguel Herrero, anunció en su intervención en la XXXIII Jornada de Aceituna de Mesa de Asaja-Sevilla que va a poner en marcha en el sector del verdeo una campaña de inspecciones y sanciones con una finalidad disuasoria y para "poner coto a esta mala praxis que vulnera la Ley de Mejora de la Cadena Alimentaria".

Según indica Asaja en una nota, Herrero ha apuntado que el sector del verdeo "está en el punto de mira de la Agencia, ya que se han recibido denuncias que ponen de manifiesto el incumplimiento generalizado de la obligación legal de suscribir un contrato por escrito en las operaciones de compraventa de aceituna de mesa".

Esta campaña, según explicó Herrero, se enmarca en el programa de trabajo de la Agencia, que con un cuerpo de 80 inspectores promueve actuaciones disuasorias donde encuentre más propensión a incumplir la Ley, y el sector de la aceituna de mesa, en el que está muy extendida la "venta a resultas", es uno de ellos.

Así, recordó el director de la AICA, desde enero de 2014 está en vigor la Ley de Mejora de la Cadena Alimentaria, que obliga a los industriales y a los "puestos de compra" que se surten de la producción de los agricultores de verdeo a firmar un contrato por escrito en transacciones comerciales superiores a 2.500 euros. En dicho contrato debe quedar reflejado un precio fijo o bien un precio que se pueda determinar con un indicador concreto, objetivo y verificable, expresamente establecido en el contrato.

De esta forma, la AICA sancionará a los operadores investigados que incumplan con la obligación legal de suscribir contratos por escrito en las operaciones de compraventa de aceituna.

Esta norma ampara al agricultor frente a las malas prácticas comerciales y contra la conocida práctica de 'venta a resultas', en la que se entrega la mercancía a los compradores sin conocer su precio".

La puesta en marcha de esta campaña constituyó, junto a la buena noticia de la recuperación de los precios de la aceituna, el asunto más destacable de la XXXIII Jornada de Aceituna de Mesa que celebró el pasado jueves Asaja Sevilla en la Cooperativa Agrícola San José de la Puebla de Cazalla y que se organizó con la colaboración de la propia cooperativa, la Diputación de Sevilla, la Fundación Caja Rural del Sur, la correduría de seguros Asegasa y las empresas Syngenta y Masur.

Bajo el epígrafe 'Innovación, modernización y empleo en el sector de la Aceituna de Mesa ante la Nueva PAC', se desarrolló la jornada que contó con más de 300 agricultores y que fue inaugurado por el presidente de la Diputación, Fernando Rodríguez Villalobos, el alcalde de La Puebla, Antonio Martín, el presidente de la Cooperativa San José, Diego Gallego, y el presidente de Asaja Sevilla, Ricardo Serra.

El secretario general de Asaja Sevilla, Eduardo Martín, moderó las conferencias técnicas que contaron además con la intervención del jefe de Servicio de Sanidad Vegetal de la Consejería de Agricultura, Ricardo Alarcón, del jefe de Relaciones Institucionales de Syngenta, Germán Canomanuel, y del técnico responsable de la sectorial de aceituna de mesa de Asaja, José Vázquez.

La nueva Ley de Mejora de la Cadena Alimentaria, que responde a una demanda del sector, despertó interés entre los olivareros "que padecen las consecuencias de años de imposiciones y malos hábitos".

Respecto al carácter de la aceituna como producto perecedero, el director de la AICA, José Miguel Herrero, recordó que sobre esta cuestión "ya se había pronunciado oficialmente la Agencia", de forma que "la aceituna de mesa debe ser contemplada como un producto perecedero por los que el periodo de pago que se fije en los contratos de compraventa debe ser inferior a los 30 días desde la última entrega".

José Miguel Herrero informó a los agricultores presentes en la jornada de la posibilidad que se les ofrece de denunciar directamente a la Agencia las prácticas de las industrias o de los puestos de compra que se nieguen a hacer contrato o presenten al agricultor un contrato que no recoja el precio o no cumpla con alguno de los aspectos que marca la Ley, y en el caso de que no puedan denunciar directamente, tienen la posibilidad de dirigirse a Asaja que pondrá en alerta a la Agencia.

La menor cosecha de los últimos 10 AÑOS

El análisis de la campaña de recolección recién iniciada lo efectuó el responsable de la sectorial de aceituna de mesa de Asaja, José Vázquez, quien destacó que los olivareros de aceituna de mesa "obtendrán este año rentabilidad de sus olivos por primera vez en últimos 17 años".

La buena marcha del mercado del aceite de oliva, con precios que superan los cuatro euros por kilo, y la escasez de aceituna "verdeable", han provocado un incremento de entre el 30 y el 35 por ciento de los precios de la aceituna en verde, con lo que la aceituna de mesa recupera los precios a los que cotizaba a mediados de los años 90.

La sequía y las altas temperaturas han ocasionado que gran parte de los olivos de secano no reúnan las condiciones para "verdearse", lo que redundará en un descenso de la cosecha prevista para esta campaña. Los servicios técnicos de Asaja Sevilla estiman que la producción nacional de aceituna de mesa estará en torno a las 460.000 toneladas, un 15,5 por ciento menos de las que se recolectaron la pasada campaña, en la que se cosecharon 545.000 toneladas de aceituna de verdeo.

Ha apuntado que estas previsiones probablemente continúen a la baja, dado que la climatología tampoco está favoreciendo la campaña y no se esperan lluvias en los próximos días.

Por variedades, los servicios técnicos de Asaja Sevilla estiman la producción de la variedad manzanilla en 125.000 toneladas (181.000 el año anterior); la gordal en 27.000 toneladas (25.000 la pasada campaña); la hojiblanca en 200.000 (264.000 en 2014/2015), la carrasqueña en 60.000 (23.000 el año anterior); la cacereña en 31.000 (34.000 el año anterior) y 17.000 toneladas de otras variedades menores.

Esta escasa cosecha "verdeable", como señaló Vázquez, supondrá una reducción de los stocks existentes, dado que las salidas de aceitunas anuales se sitúan en 600.000 toneladas. El nivel de exportaciones, por encima del 63 por ciento del total, y la fortaleza del dólar va a permitir que los consumos continúen manteniéndose en niveles altos como sucedió en la campaña pasada.

No obstante, los altos costes de producción de nuestras aceitunas, pese a la mejora de los precios, ofrecen una escasa rentabilidad en este sector, ya que oscilan entre 0,70 y 0,81 euros por kilo.

Por su parte, el jefe de Relaciones Institucionales de Syngenta, Germán Canomanuel, expuso el compromiso de su empresa con la agricultura sostenible e incidió en la campaña que han puesto en marcha a nivel mundial, en colaboración con los agricultores, para el fomento de la biodiversidad y el cuidado del suelo.

Por último, el jefe de Servicio de Sanidad Vegetal de la Consejería de Agricultura, Ricardo Alarcón, expuso las medidas que ha puesto en marcha la Consejería para evitar que llegue a Andalucía la bacteria de la Xylella Fastidiosa, letal para los olivos y para cultivos leñosos.

Alarcón ha señalado que España y la cuenca mediterránea reúne las condiciones climáticas y cuenta con los vectores propicios para la extensión de la Xylella, por lo que los cuatro laboratorios de Sanidad Vegetal de la Junta "están preparados, conocen la bacteria y pueden identificarla para que se tomen las medidas para evitar su extensión".

Ha aclarado que "el mayor peligro proviene de la entrada en Andalucía de plantones descontrolados, introducidos de manera ilegal, así como de plantas ornamentales, que no están sujetas a los controles que se le hacen a los viveros, y que pueden portar la bacteria".

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