La Diócesis palentina, el Ayuntamiento de Palencia y la Diputación Provincial, han mantenido este martes un encuentro para establecer un protocolo de actuación a la hora de acoger a refugiados que provienen de la guerra de Siria.

En concreto, según ha explicado la presidenta de la Diputación Provincial, Ángeles Armisén, se trata de un protocolo de actuación en el que se recojan "los recursos disponibles y las actuaciones a realizar" en conjunto con el Gobierno de la nación, ayuntamientos, etcétera, para que en el momento que se asignen el número de refugiados Se esté "en disposición de poderles atender".

"Hay que recibirlos de una manera ordenada", ha manifestado al tiempo que ha añadido que la mayoría de los alcaldes y municipios de la provincial se han puesto a disposición de la Institución Provincial para que se cuente con ellos.

Por su parte, el administrador diocesano, Antonio Gómez, ha apuntado que el objetivo es llevar a cabo "una acogida razonable" por lo que es necesario coordinarse con otras administraciones.

"El problema no son los edificios", ha aseverado, sino la necesidad de psicólogos o intérpretes "que los ayuden y los puedan atender", ya que para la Diócesis la mayor preocupación es "cómo recibir a esa gente y lo que se les va a dar".

Por último, el alcalde de Palencia, Alfonso Polanco, ha afirmado que "el pueblo palentino es solidario" mientras aseguraba que Palencia está preparada para cubrir las necesidades básicas de quien venga, por lo que se trabaja en la atención especializada.

"Estamos trabajando con las entidades del tercer sector y tendremos que trabajar con los técnicos y sanitarios para poder ofrecerles lo mejor de Palencia" ha finalizado.