El consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, José Fiscal, ha presentado este lunes la campaña 'La naturaleza no necesita que le eches un cable', promovida en colaboración con la Federación Andaluza de Electrodomésticos (FAEL) y que supone el establecimiento de lugares para el reciclaje de pequeños electrodomésticos en unos 800 puntos en comercios del sector.

En declaraciones a los periodistas en un negocio de venta de menaje en la capital hispalense, Fiscal ha aludido al "esfuerzo" que se precisa en la comunidad autónoma andaluza, fundamentalmente de concienciación, para aumentar la ratio de kilos por habitante que se reciclan anualmente, puesto que ésta se sitúa en los dos kilogramos, "lejos" de la cifra de cuatro establecida como obligación por Europa.

Desde junio del pasado año, cuando entró en vigor el convenio en el que se enmarca esta campaña, se han recogido más de cuatro millones de kilos, 64.000 aparatos "de todo tipo", cifra "positiva" pero que, según el consejero, sigue invitando a ser "más ambiciosos".

La casuística es variada, pero como principales causas de esta tesitura está, por un lado, la amplia geografía andaluza, que implica mayor dificultad a la hora de encontrar un 'punto limpio' cercano, y por otro, el 'canibalismo' que se produce cuando determinadas personas recogen estos residuos de los lugares establecidos para venderlos como chatarra. Asimismo, la crisis económica influye en una menor renovación de estos electrodomésticos.

A este respecto, el secretario general de la FAEL, Carlos Bejarano, ha especificado que el sector ha llegado a porcentajes de un 30 o 40 por ciento por debajo de la media de reposición, aunque ya se ven indicios más positivos. También ha aludido a los casos en los que las familias conservan en los trasteros estos aparatos —se estiman unas 4.000 toneladas en esta situación— o a los que depositan los residuos en los contenedores de basura orgánica, con lo que "no se sigue el proceso adecuado" para el tratamiento de los mismos.

Así, Fiscal ha realizado un llamamiento a los andaluces, ya que su implicación y colaboración es necesaria para aumentar las cantidades recogidas y asegurar su correcta gestión y su reciclado.

La Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio ha dado un papel relevante al reciclaje de este tipo de residuos a través de los diversos planes autonómicos de gestión y del Reglamento de Residuos de Andalucía. Recientemente, además, se ha aprobado un nuevo decreto sobre los mismos que pretende evitar su tráfico incontrolado.

En esta normativa se establece, por ejemplo, la obligación de los grandes distribuidores con zona de ventas superior a 400 metros cuadrados de recoger los aparatos más pequeños. De ahí que el consejero también haya hecho hincapié en la necesidad de que los ayuntamientos se impliquen en el proceso, ya que son los que prestan los servicios de recogida.

En este sentido, la Consejería ha firmado un convenio este año con los ayuntamientos y los principales fabricantes de electrodomésticos con el fin de garantizar el cumplimiento de los objetivos de recogida y reciclaje que la marca la Unión Europea. Este acuerdo, entre otras cuestiones, prevé el desarrollo de campañas de concienciación como la que este lunes se ha presentado.