El vallisoletano Jorge Adrados vuelve al Calderón con 'Natural', un canto al sosiego, lo sencillo y lo auténtico

El artistas vallisoletano Jorge Adrados vuelve a la Sala de Exposiciones del Teatro Calderón, ocho años después, con una nueva muestra titulada 'Natural', en la que el pintor realiza un canto al "sosiego" y la "simplificación de formas" e invita al espectador a vivir la belleza que encierra la naturaleza.
Jorge Adrados, ante una de sus obras en 'Natural'
Jorge Adrados, ante una de sus obras en 'Natural'
EUROPA PRESS
Jorge Adrados, ante una de sus obras en 'Natural'

El artistas vallisoletano Jorge Adrados vuelve a la Sala de Exposiciones del Teatro Calderón, ocho años después, con una nueva muestra titulada 'Natural', en la que el pintor realiza un canto al "sosiego" y la "simplificación de formas" e invita al espectador a vivir la belleza que encierra la naturaleza.

La nueva exposición de Adrados es fruto del trabajo realizado en los últimos cuatro años en la que sus obras, tanto pinturas como troncos salvados del fuego a los que ha practicado el vaciado, se caracterizan porque, según ha expuesto su autor, "reflejan el no artificio frente a la vida, la observación de la naturaleza y la belleza que regala a quien la contempla".

Por ello, su obra huye de la figuración y de la narrativa y se centra en un lenguaje de "sensaciones, emociones y palpitaciones" que invita al espectador a vivir la vida desde lo sencillo, para lo cual su técnica consiste, fundamentalmente, en la superposición de capas y capas de veladuras.

El pintor, durante la presentación de la muestra, acto que ha contado con la presencia del alcalde, Óscar Puente, de la edil de Cultura y Turismo, Ana Redondo, ha enfatizado que su trabajo se centra en los cuatro elementos de la naturaleza, fuego, agua, tierra y aire, y ha puesto como paradigma de su obra una de las piezas que ocupan un lugar central en la sala y que es un simple tronco vaciado y con su interior pintado en un tono azul.

Se trata de una pieza "salvada" del fuego, al que estaba destinada, y que durante nueve meses estuvo tratando en su origen, Olmedo, y utilizando como improvisado taller la granja de ovejas de un amigo en dicha localidad.

"Allí dormía en mi furgoneta y me dediqué al vaciado y pintado del tronco", ha explicado el artista, quien ha expresado su satisfacción tras incidir en que gracias a dicho trabajo fue testigo de cómo crecían los girasoles y nacían los corderos.

"Vi cómo la naturaleza me abría sus puertas a través de este árbol", ha insistido Adrados, un enamorado de la belleza que ella encierra y cuyo único deseo era "desnudarse ante el lienzo y mostrar la naturalidad" con la que vive, "frente a la influencia de la tecnología que está contribuyendo a que olvidemos de los auténticos valores".

Nacido en 1969 en Valladolid, Adrados vive y desarrolla su actividad artística en esta ciudad. Tiene obra en la Colección Particular de S. A.R. Don Felipe de Borbón, Príncipe de Asturias, la Junta de Castilla y León, el Museo Municipal de Orense, la Diputación de Valladolid y distintas colecciones particulares en España, Portugal, Italia y República Dominicana.

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