La vicealcaldesa y alcaldesa en funciones del Ayuntamiento de Oviedo, Ana Taboada (Somos) ha asegurado este viernes que hay concejales del PP que, durante su etapa en el Gobierno local, "se negaban" a oficiar bodas entre personas del mismo sexo.

Después de que el portavoz adjunto del PP, Gerardo Antuña, negara en rueda de prensa este extremo, Taboada ha asegurado que, si no ha habido negativas a celebrar bodas, es porque "se actúa de forma preventiva" avisando a los concejales de cuándo habrá una boda entre homosexuales. Es así, según la edil de Somos, cómo "se organizan los concejales que se niegan a realizarlas o no están de acuerdo con ellas".

Ahora, ha señalado, más allá del nombre de los contrayentes, no habrá "ninguna" especificación entre la documentación que se envíe a los concejales de Gobierno —los únicos con competencia para realizar enlaces civiles— que permita identificar si la pareja que acude al Ayuntamiento es heterosexual u homosexual.

Acompañada por el concejal de Cultura, Roberto Sánchez Ramos (IU), la concejala de Educación Mercedes González (Somos), Isidro Iván Álvarez (IU), y sin ningún miembro del PSOE presente, Taboada ha ofrecido una rueda de prensa en la que ha asegurado que "la señalización es innecesaria, anacrónica y vulnera los principios de igualdad e intimidad de las personas". .

Mantendrán la plantilla de educadoras infantiles

La vicealcaldesa ha comparecido ante los medios después de celebrar una Junta de Gobierno Local en la que también han acordado mantener íntegra la plantilla de educadoras infantiles para las escuelas de 0 a 3, al haber alcanzado los niveles de matriculación del pasado curso.

De este modo, las dos educadoras que iban a ser despedidas, y aquellas docentes a las que se les iba a reducir la jornada, podrán conservar sus puestos de trabajo.

Con ello, Taboada ha anunciado que pedirán al Principado que otorgue al municipio la misma subvención que el curso pasado, dado que la concedida para el curso 2015-2016 se basaba en datos de matrícula inferiores a los finalmente alcanzados.

Durante la Junta de Gobierno, sus participantes han decidido establecer como norma concentrarse a las 12.00 horas ante el Consistorio cada vez que se conozca una nueva muerte por violencia de género. Cada vez que esto ocurra, funcionarios y ediles saldrán a guardar un minuto de silencio como repulsa. Asimismo, ordenarán que se cuelgue una pancarta en el palco del Ayuntamiento en la que se informe de cuántos casos se han dado.