El equipo de Gobierno del PP en el Ayuntamiento de Jaén ha conseguido sacar adelante en Pleno toda la batería de medidas económicas que ha llevado este jueves al pleno ordinario del mes de julio y con las que se pretendía dar liquidez a corto plazo para garantizar el cobro de nóminas y el mantenimiento de los servicios en los próximos meses.

Para ello ha contado a veces con la abstención y otras con el respaldo de los tres concejales que conforman el grupo de Ciudadanos y que han permitido al PP salvar su situación de minoría. Los socialistas se han movido entre la abstención y el voto en contra, mientras que Jaén en Común ha votado mayoritariamente en contra de las medidas que se han llevado a pleno.

De esta forma se ha llevado un nuevo anticipo de la PIE de 4 millones de euros y también una petición de un anticipo para las corporaciones locales previsto en el artículo 36 de la comunidad autónoma andaluza de 1,2 millones de euros.

Otra de las aprobadas es la adhesión al fondo de ordenación de 2016 por valor de 14,1 millones de euros y donde se incluyen vencimientos de capital e intereses de la deuda a largo plazo de 2016, así como vencimientos del plan de pago a proveedores (13,7 millones de euros), más otros 570.000 euros de sentencias judiciales firmes que no se pudieron incluir en el fondo de ordenación de 2015.

Todos los grupos políticos de la oposición han insistido en que se trata de medidas con soluciones a corto plazo, mientras que lo que necesita el Ayuntamiento de Jaén, entre los más endeudados de España, es un plan a largo plazo que lo saque de la situación en la que se encuentra. Así, el PSOE ha defendido la necesidad de un rescate que "preserve la autonomía del Ayuntamiento". Desde Ciudadanos se ha abogado por "un plan de choque total o de salvamento" y Jaén en Común

ha rechazado seguir adoptando medidas que a la larga van a suponer "graves sacrificios" para esta ciudad.