La contratación a personas en riesgo de exclusión se ha incrementado un 59 por ciento en Baleares en el primer semestre de 2015, según un informe de la Fundación Adecco, que en el primer semestre del año ha generado 415 empleos para personas que atravesaban situaciones muy críticas en Baleares, frente a los 261 de 2014.

En un comunicado, Fundación Adecco destaca que un 43,9 por ciento de las personas que han encontrado empleo disponían de un certificado de discapacidad, mientras que un 24,3 por ciento de ellos estaban en grave situación económica -muchos han perdido su vivienda o están en riesgo de hacerlo-.

Asimismo, un 17,4 por ciento era mayor de 45 años parado de larga duración, un 7,3 por ciento mujeres con responsabilidades familiares no compartidas y un 4,8 por ciento víctimas de la violencia de género.

Además, el informe destaca que un 60 por ciento de los integrados han sido mujeres y un 35,2 por ciento hombres; así como que un 35 por ciento supera los 45 años.

Por su lado, el nivel formativo predominante del trabajador que se encontraba en riesgo de exclusión es el de estudios elementales (37 por ciento), es decir, personas con certificado de escolaridad, garantía social y ESO, entre otros.

La mayoría han encontrado una ocupación dentro del sector Hostelería (27,8%), siendo el puesto más habitual el de camarero o camarero de pisos; y el tipo de contrato más habitual al que han accedido los trabajadores en riesgo de exclusión ha sido el temporal por Acumulación de Tareas (58%).

Proceso de recuperación

El director general de la Fundación Adecco, Francisco Mesonero, ha declarado que esta tendencia refleja que "las personas en riesgo de exclusión se están integrando en el proceso de recuperación económica, lo cual es un indicador positivo que demuestra que la diversidad va calando cada vez más en las empresas".

No obstante, considera que "la onda expansiva de la crisis sigue muy presente en la sociedad", afectando de forma especialmente intensa a las personas que, ya antes de la recesión, encontraban obstáculos adicionales para encontrar empleo y que fueron los primeros en perderlo.

Por ello, apuesta por "seguir trabajando con énfasis para que las personas que lo tienen más difícil no sólo tengan empleo en tiempos de bonanza económica, sino que puedan acceder al mismo y conservarlo en coyunturas más desfavorables, sin que un certificado de discapacidad o una edad avanzada pese más que sus competencias", ha concluido.