La portavoz del Gobierno valenciano, Mónica Oltra, ha defendido que ella y "mucha gente" prefiere que todas las instituciones del Estado sean elegidas de manera democrática, también el jefe de Estado", ha señalado la vicepresidenta del Gobierno valenciano, quien ha apuntado que está "con todo el derecho de defenderlo porque no es una cuestión de creencia sino de posición política".

Oltra se ha pronunciado de esta manera en la rueda de prensa posterior al pleno del Consell al ser preguntada por la sesión parlamentaria de este jueves de comparecencia de los aspirantes a senadores territoriales, en la que Carles Mulet (Compromís) afirmo que no se cree ni la Constitución ni la figura del rey. "Se refería al rey de España, y no a Melchor, Gaspar o Baltasar", ha apuntado de manera irónica.

"Al final esto no es una cuestión de creencia y a mí me da igual en lo que crea la gente, sino de que la Constitución se ha de cumplir y acatar. A partir de ahí, que una persona diga que no cree en la Constitución, supongo que se refiere a que hay partes que no comparte", ha comentado.

En este sentido, ha señalado que el artículo 135 de la Constitución —para limitar el déficit— no lo comparte, aunque el 20 —sobre libertad de expresión— le "gusta mucho".

Por lo que se refiere al rey, "me interesa en cuanto a que es cabeza de Estado, sino lo fuera es verdad que la aristocracia no me interesa. No sé si iba por ahí", ha comentado.

A su jucio, "probablemente Mulet quería decir que hay modelos de estado no monárquicos que le gustan más". De hecho, "hay mucha gente que preferimos que todas las instituciones del Estado sean elegidas de manera democrática, también el jefe de Estado y estamos con todo el derecho de defenderlo porque no es una cuestión de creencia sino de posición política".

Quejas de barberá

Por otro lado, y en relación a las quejas de la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá por "ataques personales" en la comisión, Oltra ha recordado en primer lugar que el examen de valencianía "se impuso en las Corts con los votos del PP".

Tras esto, Olta ha argumentado que Barberá "lleva mucho tiempo confundiendo la institución con su persona", lo que ha tenido consecuencias "incluso en el ámbito judicial".

Además, "ataque personal no es decirle a una persona que ha presentado cero iniciativas en cuatro años", o sus ausencias en las sesiones plenarias, es una "valoración política de su trabajo en una institución. "Un ataque personal es decirle que no sabe cocinar la paella", ha agregado.