Los servicios marítimos de Melilla han salvado a un inmigrante que intentaba acceder la noche la noche del viernes al sábado en uno de los barcos que enlazan la ciudad con la Península para viajar de "polizón".

Según han informado a Europa Press fuentes policiales, esta persona, cuya identidad y nacionalidad no han sido facilitadas, "fue atendida en el mismo puerto y su integridad física no corre peligro".

El suceso en el puerto de Melilla se ha producido después de que esta misma semana se interceptara a un total de 26 menores extranjeros no acompañados (Menas) en el Puerto de Melilla que pretendían ir de polizones en los barcos que unen la ciudad con Málaga, Almería y Motril (Granada).

La "redada" se produjo sobre las 23,30 horas de la noche del martes, cuando este grupo numeroso intentó en masa acceder al lugar a la zona de seguridad del puerto, a través de la conocida como "Cuesta de la Florentina", intentando llegar a la verja allí ubicada, y que conecta con "el paseo del espaldón del puerto".

Por último, las citadas fuentes han indicado que a pesar de las constantes intervenciones en los alrededores del puerto y sus escolleras, son decenas los inmigrantes que regresan a estos lugares a esperar una oportunidad de introducirse en los ferrys que unen con Andalucía para viajar irregularmente a la Península.