En diciembre próximo se abrirá oficialmente en los Alpes suizos el tercer túnel más largo del mundo, de 34,6 kilómetros de longitud, en Lötschberg.

Se trata de un corredor ferroviario terrestre y se ha construido con el objetivo de descongestionar el tráfico transalpino por carretera.

Este pasado viernes se realizó el primer viaje inaugural. Empezó a construirse hace ocho años y ha tenido un coste de más de 2.500 millones de euros.

80 trenes diarios

Actualmente, más de 4.000 vehículos pesados cruzan diariamente los Alpes suizos, lo que provoca atascos, accidentes y contaminación. El objetivo es acortar el tiempo de trayecto entre Alemania e Italia y que circulen por él 80 trenes diarios.

Es el corredor ferroviario terrestre más largo, pero los ingenieros quieren que para 2015 se convierta en el túnel más largo del mundo, después del Canal de la Mancha y del japonés Seikan, cuando se una el Lötschberg a un segundo pasadizo paralelo, el Gotthard, que acortará el tiempo de viaje de Zurich a Milán a sólo dos horas y media.