¿Cuál es el primer recuerdo que tiene de Murcia?

Las pastillas de café con leche Alonso. Si vivías en un pueblo y venías a Murcia, no hacías un viaje victorioso si no te compraban una caja de pastillas de café con leche Alonso.

La mejor banda sonora para disfrutar de Murcia es...

El silencio.

Cuando cierra los ojos y piensa en Murcia, ve:

Mis cuadros.

¿Qué época del año le sienta mejor a la ciudad?

Cuando desaparecen los murcianos y sólo está la catedral y yo, andando por sus calles.

¿A qué sabe Murcia?

A historia, a sabiduría y a aquel mundo árabe que nos dejó lo mejor que Murcia sigue teniendo.

¿A qué huele Murcia?

Murcia es agridulce. Al margen del mundo de la cultura, que es mucha gente, Murcia huele a vida. En la calle huele a sol, a ruido, a flores, a frutas... Murcia huele a color. El mundo del arte apesta.

Las mejores vistas de toda la región están en...

Depende del día, la hora y el estado de ánimo. El paisaje de Murcia está hecho para la gente que sabe mirar. La belleza del paisaje es mágica. Una simple palmera, morera, un trozo de monte, cuatro limoneros... Depende de quién lo mire.

Proponga una excursión...

El cañón de Almacenes, la bajada impetuosa de La Serreta y saber mirar el paisaje del Cajitán, que está en la carretera vieja de Cieza a Mula. Sólo los espíritus finos pueden disfrutar de un paisaje tan fashion.

Ama a Murcia por...

Amo a Murcia por una docena de amigos y por miles de enemigos.

Pero le desquician...

Los murcianos.

En Murcia, más vale no dejarse caer...

Por algunos lugares que visiten ‘ventanilleros' de la cultura. Van de chamanes y sólo son conserjes, obreros de la Cultura.

Recomiende una película ambientada en Murcia.

Algunas películas del neorrealismo italiano, algunas de los hermanos Taviani, de Antonioni, de Buñuel, aunque no han sido rodadas en Murcia, podrían pasar por estar rodadas en esta ciudad. Murcia tiene mucho de napolitana. La influencia de la Plaza Belluga es más Nápoles que Murcia. Murcia absorbió muy bien la influencia del Sur de Italia.

Luego está, Pajarito, que dio un poco la imagen de Murcia.

¿Qué personaje destacaría de Murcia?

La de un sabio huertano. También a Gaya, a quien aprecio no por su pintura sino por su cultura. Él es uno de los personajes más importantes que ha dado Murcia. También están Margarita Lozano y Francisco Rabal.

Y un libro de Murcia...

Escrito sobre Murcia... Murcia no tiene gente que sobresalga en la literatura. A mí me fascina un libro editado en Murcia: Perito en lunas, de Miguel Hernández. También el Códex Escurialensis, que está en la Biblioteca Nacional, editado por José López Albadalejo. Tiene un diseño mágico de Severo Almansa.

¿Qué edificio murciano no se cansa de mirar?

Ese diálogo mágico entre el imafronte de la catedral con el edificio Moneo. Y un colector de vidrio que ha hecho Juan Antonio Molina en la avenida Miguel Induráin, que es de vanguardia. Es una pieza de primera.

Súbase al carro de los tópicos, ¿cómo son los murcianos?

Los tópicos son para gente que no tiene imaginación, pero bueno... El murciano es ocurrente y pícaro. El lenguaje del murciano, de llamar a un rincón, un cornijal, y a una esquina, picoesquina, eso es típico. El murciano es un personaje de la picaresca española muy imaginativo.

¿En qué lugar de Murcia le gustaría que esparcieran sus cenizas?

Yo creo que las colgarán en una bolsita, en un limonero de la huerta de Murcia, especialmente en la de Cieza.

BIO

Nació el 14 de noviembre de 1947 en el número 25 (hoy 27) de la calle del Hoyo de Cieza. No usa móvil, reloj, coche, ni fax. Vive en Madrid.

Una excursión...

... Sólo para espíritus finos:«Hay que ver el cañón de Almadenes, la bajada de la Serreta y el paisaje del Cajitán».