Celso Morga Iruzubieta, nuevo arzobispo de Mérida-Badajoz tras la renuncia de Santiago García Aracil por su edad

La Santa Sede ha hecho público este jueves que el Papa Francisco ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la archidiócesis de Mérida-Badajoz presentada por Santiago García Aracil, al que le sustituye en el cargo Celso Morga Iruzubieta, quien fue nombrado arzobispo coadjutor de Mérida-Badajoz el 8 de octubre de 2014 y tomó posesión el pasado 15 de noviembre.
Santiago García Aracil y Celso Morga
Santiago García Aracil y Celso Morga
EUROPA PRESS
Santiago García Aracil y Celso Morga

La Santa Sede ha hecho público este jueves que el Papa Francisco ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la archidiócesis de Mérida-Badajoz presentada por Santiago García Aracil, al que le sustituye en el cargo Celso Morga Iruzubieta, quien fue nombrado arzobispo coadjutor de Mérida-Badajoz el 8 de octubre de 2014 y tomó posesión el pasado 15 de noviembre.

Así lo ha comunicado la Nunciatura Apostólica en España a la Conferencia Episcopal Española (CEE), según informa en una nota de prensa en la que destaca que, en conformidad con el Código de Derecho Canónico, al obispo diocesano que haya cumplido 75 años de edad "se le ruega que presente la renuncia de su oficio al Sumo Pontífice, el cual proveerá teniendo en cuenta todas las circunstancias".

Al respecto, también se indica que, al quedar vacante la sede episcopal, "el obispo coadjutor pasa inmediatamente a ser obispo de la diócesis para la que fue nombrado, con tal de que hubiera tomado ya legítimamente posesión".

En rueda de prensa, García Aracil ha anunciado que este jueves el Papa Francisco ha manifestado oficialmente la renuncia que pidió al cumplirse "la edad propia de jubilación como hacen todos los obispos", a la vez que ha agradecido al Santo Padre que también tuviera la "gracia" de poder contar desde hace unos seis o siete meses con un arzobispo coadjutor, Morga, de modo que no se deberá "esperar tanto tiempo" para su sustitución.

En este sentido ha pedido que "oficialmente" se "entienda" que Morga comienza a ser el arzobispo titular, mientras que él mismo pasa a ser arzobispo emérito de Mérida-Badajoz.

"¿Qué significa esto? Que yo me voy. ¿Y cómo se va contento o disgustado? Ni blanco ni negro, porque esto no es ni como la lotería ni como, qué se yo, una fruta que se abre para saber que está dulce o no, estoy es ley de vida", ha indicado.

Solidez de la iglesia

En todo caso ha reconocido que recibe esta noticia "con gran satisfacción" porque "da a entender la solidez de la Iglesia", así como no se puede marchar de forma definitiva porque está "encardinado" a la archidiócesis Mérida-Badajoz, a la que podría volver cuando Morga se lo pida.

Preguntado por una valoración por los 11 años que ha ejercido como arzobispo de Mérida-Badajoz, ha ahondado en que le queda "todo" por hacer porque la vida pastoral en una diócesis "es como la vida espiritual de una persona, uno hace examen y ve que sí hay ciertas evoluciones pero que cambiar un defecto por una virtud cuesta una vida".

Asimismo, García Aracil ha destacado que lo que más le ha satisfecho ha sido cada día que ha ordenado un nuevo sacerdote.

Reforzar el presbiterio con nuevos miembros

En un sentido similar se ha pronunciado Celso Morga que, además de agradecer la confianza depositada en él por el Papa Francisco al encomendarle la archidiócesis y a García Aracil por su acogida "verdaderamente fraterna" y por su labor pastoral en 11 años de servicio episcopal, ha avanzado que su "deseo primero" como arzobispo es "reforzar el presbiterio con nuevos miembros".

"Quiero empeñarme en el fomento de auténticas vocaciones al sacerdocio y a la vida consagrada y formarlos conforme a las indicaciones de la Iglesia", ha concretado, a la vez que ha remachado que la nueva evangelización, a través sobre todo de las familias, será también, junto con las vocaciones, la "prioridad" de su servicio episcopal.

Con una "mirada de particular atención", ha dicho, hacia los "pobres y quienes estén pasando por particulares problemas humanos debidos a la enfermedad, marginación social o la crisis económica".

En este sentido ha indicado que "es el Espíritu Santo quién está pidiendo a toda la Iglesia esta nueva evangelización, con estas características de caridad y misericordia", y ha valorado: "nosotros, como iglesia particular, no podemos ni queremos desentendernos, manteniéndonos al margen".

Finalmente y preguntado por las críticas que han suscitado la realización de unas obras por parte del arzobispado, Morga ha explicado que estos trabajos han consistido en la adaptación como su vivienda de una zona en una de las plantas del arzobispado en la capital pacense que cuenta con unos 250 metros cuadrados incluida una terraza y una habitación para ordenadores, en relación a lo cual ha calificado de "acierto" que este piso "muy normal" esté en el edificio del arzobispado y cerca de la Catedral.

También ha agregado un gasto "absolutamente necesario" en la biblioteca del Seminario que estaba "en grave peligro de derrumbe" y de "que se perdieran libros muy importantes y muy valiosos", y ha avanzado que se inaugurará el próximo día 6 de junio con la presencia del nuncio apostólico en España Renzo Fratini, de modo que ha sostenido que "las noticias no tienen fundamento".

BIOGRAFÍAS

Celso Morga Iruzubieta nació en Huércanos, La Rioja, el 28 de enero de 1948. Completó sus estudios eclesiásticos en el Seminario diocesano de Logroño y fue ordenado sacerdote el 24 de junio de 1972. Posteriormente, cursó la licenciatura en Derecho Canónico en la Universidad de Navarra, donde obtuvo el Doctorado en 1978.

En 1987 fue llamado a Roma para trabajar en la Congregación para el Clero, el dicasterio vaticano que se ocupa de los asuntos que se refieren a la vida y ministerio de 400.000 sacerdotes católicos en todo el mundo. Allí ha trabajado de jefe de Sección y, desde noviembre de 2009, de subsecretario, cargo que ha ocupado hasta su nombramiento de secretario y Arzobispo titular de Alba Marítima, siendo ordenado obispo por el Papa Benedicto XVI en la Basílica de San Pedro el día 5 de febrero de 2011.

Por su parte, Santiago García Aracil nació el 8 de mayo de 1940 en Valencia. Recibió la ordenación sacerdotal el 21 de septiembre de 1963 y es Licenciado en Teología por la Facultad de Teología San Vicente Ferrer de Valencia (1976).

El 27 de diciembre de 1984 fue ordenado obispo auxiliar de Valencia, cargo que desempeñó hasta 1988 cuando fue nombrado obispo de Jaén, mientras que el 9 de julio de 2004 el Papa San Juan Pablo II le nombró arzobispo de Mérida-Badajoz, de la que tomó posesión el 4 de septiembre de 2004. En la CEE es miembro de la Comisión Episcopal de Medios de Comunicación Social desde marzo de 2014.

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