El presidente del Principado y candidato socialista a la reelección, Javier Fernández, ha apuntado este viernes en Cangas del Narcea que la política minera de Mariano Rajoy "castiga al suroccidente con el silencio cómplice del PP asturiano".

"Es una lástima que mientras el Gobierno de Castilla y León se preocupa por sus empresas carboneras y se opone a las decisiones del Ministerio de Industria, Mercedes Fernández se limite a aplaudir o a atacar a los socialistas", ha reprochado el candidato socialista, mostrando su comprensión ante las movilizaciones anunciadas por los sindicatos.

El líder del PSOE asturiano ha incidido en su reclamación al Ministerio de Fomento para que "reanude las obras de la autovía a Cangas del Narcea, básica para vertebrar el interior del Principado".

Igualmente, Javier Fernández se ha comprometido a acabar este mismo año el plan puesto en marcha por su Gobierno para frenar el declive de Cangas, Tineo, Degaña, Allande e Ibias, la comarca con menor densidad demográfica de Asturias, según indican desde el PSOE en nota de prensa.

El dirigente socialista ha subrayado que el Gobierno de Asturias "no se suma ahora a las quejas de los trabajadores, sino que ya lleva tiempo alertando de las consecuencias de las decisiones del Ministerio de Industria". "Sin ir más lejos, el 27 de abril el consejero Graciano Torre presidió una reunión con los alcaldes y los representantes sindicales en la que se acordó por unanimidad pedir al ministerio la modificación de la orden ministerial que regula el nuevo mecanismo de consumo de carbón térmico", argumentó.

Junto a la minería y las infraestructuras, Javier Fernández hizo mención a la ganadería, con especial referencia a las explotaciones de montaña. "Si hubiera que redactar una terna de cuestiones urgentes para este territorio, tengo claro cuáles serían: rectificación urgente de la política minera, apoyo al desarrollo agroganadero y construcción de la autovía con su posterior prolongación, como carretera, hasta Ponferrada".

De hecho, Fernández ha citado el Plan del Suroccidente, que está incluido en el programa electoral y fue anunciado por el jefe del Gobierno asturiano en el último debate de orientación política, y cuyo objetivo último "es poner en marcha una serie de actuaciones que evite el declive de la comarca suroccidental, lastrada por su declive demográfico y económico".