El PSOE-A ha considerado este miércoles "inaudito" el "portazo" que el PP-A ha dado a los contactos de cara al Pleno de investidura, demostrando que realmente no tiene "nada que aportar".

En declaraciones a los periodistas en el Parlamento, el portavoz parlamentario del PSOE-A, Mario Jiménez, se ha referido así al hecho de que el presidente del PP-A, Juanma Moreno, haya dado instrucciones al portavoz parlamentario de su grupo, Carlos Rojas, para que cancele la reunión prevista esta tarde los socialistas, en el marco de las negociaciones para la investidura de Susana Díaz como presidenta de la Junta, hasta que ésta dé explicaciones sobre las supuestas irregularidades en la adjudicación de la mina de Aznalcóllar, en Sevilla.

Tras mantener una reunión con IULV-CA y Ciudadanos, Jiménez ha considerado, en declaraciones a los periodistas, especialmente "preocupante" que el PP-A haya decidido abandonar sus responsabilidades políticas, institucionales y estatutarias y esté pensando exclusivamente en las elecciones del día 24. Ha lamentado que el PP-A se esté dedicando a buscar "excusas" para no participar en un diálogo al que está obligado dado el respaldo que obtuvo de los ciudadanos en las pasadas elecciones autonómicas.

A su juicio, ha puesto la excusa de la adjudicación de la mina de Aznalcóllar porque no tenía "nada que aportar ni que traer", después de que se le hubiera solicitado que pusiera encima de la mesa elementos para el diálogo y el acuerdo.

Jiménez ha indicado que el PSOE-A creía que había una base suficiente en las propuestas que hizo Susana Díaz en el discurso de investidura para que el PP-A, en algunas cuestiones, pudiera sentirse reflejado y hacer posible con su abstención que Andalucía tuviera un gobierno.

Sin embargo, según ha manifestado, está claro que ha decidido "abandonar sus responsabilidades y salirse del Estatuto de Autonomía y perder definitivamente el carácter de partido institucional".

"No tenían nada que aportar ni que traer y lo de poner sobre la mesa 164 medidas no era nada más que un intento de que no hubiera nada", ha señalado Mario Jiménez, para quien esas medidas no eran más que el "anexo" del programa electoral del PP-A, es decir, una "auténtica tomadura de pelo".

Ha insistido en que el PP-A no está por colaborar ni por contribuir a que Andalucía tenga un gobierno y pretende "liderar el bloque del no, en una actitud muy irresponsable, que es impropia de un partido que ha tenido un millón de votos en las elecciones del 22 de marzo".

"INCAPACIDAD"

Para Jiménez, es "inaudito" que en una ronda de consultas para un procedimiento de investidura un partido se excuse por una cuestión puntual, que lo único que esconde es su "incapacidad para poner encima de la mesa sus propuestas o las líneas básicas que entendería indispensable para esta legislatura".

Ha pedido al resto de fuerzas que no se dejen "embaucar" ni dar el "abrazo del oso" por parte del PP-A.

Preguntado sobre si el asunto de la mina de Aznalcóllar podría afectar a las negociaciones de la investidura, Jiménez, que se ha remitido a las declaraciones que ha hecho Susana Díaz este miércoles sobre el asunto, ha insistido en pedir al conjunto de fuerzas que no lo "mezclen todo".

Asimismo, ha señalado que a pesar del "portazo" del PP-A, el PSOE-A va a seguir "pulsando, llamando y forzando, como no puede ser de otra manera, que el Partido Popular, aunque no quiera, tenga abierta una vía de diálogo".

Ha recalcado que es inconcebible que un partido que tiene un millón de votos y que tiene en su mano, solo con su abstención, desbloqear que Andalucía tenga un gobierno, haya decidido dar un "portazo" a las negociaciones, en un "gesto de inmadurez, irresponsabilidad y de desgobierno" en su seno.