El presidente del Partido Popular de la Comunitat Valenciana (PPCV), Alberto Fabra, ha subrayado este lunes que, "con todo el proceso de Imelsa", han "sido contundentes cuando había evidencias claras de lo que pasaba, especialmente en el caso de Alfonso Rus, también en el caso de María José Alcón, al igual que Máximo Caturla o del exgerente de Imelsa", y que van a estar "muy pendientes".

Así lo ha indicado en declaraciones a los periodistas antes de participar en un almuerzo de trabajo con la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), a preguntas acerca de si se han planteado adoptar medidas contra la mano derecha de Rus en la Diputación de Valencia, Emilio Llopis.

Al respecto, ha señalado que Llopis "ha anunciado que ayer presentó una querella contra aquellas personas que le achacan que estuvo participando en ese tipo de conversaciones", por la difusión de grabaciones que hacen referencia a su persona, y que van a "estar muy pendientes".

Fabra ha remarcado que, "en cualquier caso, este o cualquier otro proceso va a ser tratado con absoluta rigurosidad por parte del PP" y que "aquellas personas que se alejen de lo que tiene que ser una conducta ejemplar por parte de cualquier cargo público van a ser expulsados del partido".

"lucha implacable contra la corrupción"

Ha argumentado que, "desde hace ya mucho tiempo", entendieron que "la mejor manera para poder ayudar a la Comunitat Valenciana a mejorar su imagen era una lucha implacable contra la corrupción" y que, por este motivo, han "ido vaciando el grupo popular de aquellas personas que estaban inmersas en procesos judiciales vinculados a la corrupción y todo aquello que ha aparecido alrededor también ha sido tratado de forma inflexible por el PP".