El número de niños saharauis que llegará este verano a Castilla y León dentro del programa 'Vacaciones en Paz' se incrementará este año tras cinco años de crisis en los que las acogidas han descendido para llegar a los 300.

Así lo ha afirmado la coordinadora de la Unión de Asociaciones Solidarias con el Pueblo Saharaui, Inés Prieto, quien ha indicado que durante los últimos cinco años se ha producido un descenso en el número de familias que acogen a estos niños, cuando anteriormente llegaron a ser 400 cada año los que pasaban el verano en Castilla y León procedentes de campamentos saharauis.

Prieto se ha expresado así minutos antes de participar en el encuentro que han mantenido el consejero de Sanidad de Castilla y León, Antonio María Sáez Aguado, con el ministro de Sanidad de la República Árabe Saharaui Democrática, Mohamed Fadel Lamin, para repasar la situación sanitaria de la población saharaui y los compromisos de la Comunidad en esta materia.

Precisamente entre los compromisos de Castilla y León se encuentra la atención sanitaria a estos menores que llegan procedentes de campamentos y que, según Inés Prieto, presentan sobre todo problemas derivados de carencias nutricionales como anemias, por ejemplo.

El consejero de Sanidad ha recordado que en el caso del programa Vacaciones en Paz, los niños que acuden a pasar el verano a Castilla y León y que son acogidos por familias de la Comunidad, se someten a reconocimientos médicos, exploraciones, revisiones odontológicas, y a análisis que consideren los facultativos.

Además, existen otros programas de colaboración con el Sáhara como la integración y documentación necesaria que se facilita a los menores saharauis que pasan el curso escolar en la Comunidad para que sean atendidos durante este tiempo, ya que en verano vuelven a los campamentos para mantener su nacionalidad y, al inicio del curso, regresan a Castilla y León.

Niños con enfermedades

Otro programa de atención está dirigido a niños enfermos, aunque éste último sólo ha supuesto la atención de uno o dos casos en los últimos años, en los que se trata a los menores de patologías más importantes, algunas de las cuales requieren intervenciones quirúrgicas, por ejemplo.

El ministro de Sanidad de la República Árabe Saharaui Democrática ha agradecido este esfuerzo en una situación de "sufrimiento" que dura más de 40 años y que supone la escasez de medios como alimentos, agua, medicamentos o educación, algo que con la crisis se ha agravado.

En este sentido, ha asegurado que faltan medicamentos, asistencia médica, equipamiento en hospitales y hay más problemas de nutrición, por lo que quieren que los programas de ayuda continúen y buscan apoyo para que lleguen a los campamentos médicos y traten a los enfermos que hay allí.

En este contexto, Mohamed Fadel Lamin ha calificado de "brillantes" los programas que atienden a niños en Castilla y León porque de no haber sido así no habrían tenido más oportunidades y supone salvar sus vidas, por lo que espera que continúen, ya que son "muy importantes", al igual que ha agradecido la atención a los niños con cáncer, otro problema muy importante.

El ministro ha asegurado que Castilla y León hace un trabajo "muy bueno", "profundo" y que beneficia a muchos niños y madres, algo que cree que no sería necesario si hubiera una solución para el Sáhara 40 años después.