Los más de 10.000 conductores que cada día circulan por la carretera de Madrid podrán ir más seguros en poco tiempo. Fomento va a suprimir antes de año y medio los dos puntos más críticos: los cruces de La Pedraja de Portillo y de Alcazarén.La solución pasa por colocar sendos pasos elevados en ambas intersecciones. En La Pedraja, uno normal, pero en Alcazarén rebajarán la N-601 seis metros y los coches giran por encima a la misma altura que lo hacen ahora (ver gráfico).
El cruce de La Pedraja ha sido punto negro los tres últimos años por acumular tres accidentes graves en menos de 100 metros y el de Alcazarén tenía una tasa de peligrosidad seis veces por encima de la media, pero era considerado negro.
Estas obras se complementan con la finalización del desdoblamiento entre Boecillo y Laguna de Duero, previsto para después del verano una vez solventados los accesos a esta localidad.
«La mejora de la seguridad vial ha sido una de las prioridades que marcamos en la subdelegación de Gobierno y hemos trabajado intensamente por suprimir puntos negros y en otros casos adelantarnos para que no se conviertan en ellos», explicó el subdelegado, Cecilio Vadillo.
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