La muerte de una chica de 15 años hace dos años podría acabar en una multa para el único sospechoso del caso. Los hechos ocurrieron el 27 de abril de 2013, cuando la víctima desapareció al salir de una fiesta y su cuerpo fue encontrado flotando en la playa once días después.

La fiscal pide que se le condene a catorce años de prisión pero, en caso de que no quedara demostrada la autoría del homicidio, pide que se le imponga una multa de 4.300 euros por un delito de omisión al deber de socorro, según ha informado este lunes el canal 324.

Poco después, fue detenido un joven de 19 años, quien pasó seis meses en prisión preventiva y que siempre negó el crimen. Sin embargo, admitió que ambos fueron a la playa desde la fiesta y se emborracharon juntos, aunque la dejó sola porque se negó a acompañarlo. La autopsia concluyó que la adolescente murió ahogada de forma violenta y no accidental.

El sospecho ha ofrecido varias versiones contradictorias en función de los hallazgos realizados por la policía. En un principio, incluso negó haber acompañado a la víctima a la Mar Bella, después lo admitió aunque dijo que la dejó con unos amigos, y cuando éstos desmintieron esta afirmación, admitió que fueron solos y y que mantuvieron relaciones sexuales.