El concejal de Comunicación y Seguridad del Ayuntamiento de Bormujos (Sevilla), Pablo Murillo (PP), ha salido al paso de la denuncia de un vecino, Juan Carlos V.F, ante la Guardia Civil a cuenta de presuntos insultos e intento de agresión en una trifulca en la que ambos se habrían enzarzado en plena calle. Según el edil popular, que ha tomará medidas legales, la denuncia "está llenas de falsedades".

En un comunicado, Murillo ha indicado que este vecino "ha hecho una persecución a miembros del equipo de Gobierno porque quería que lo contratáramos y no ha sido así", al tiempo que cuenta con una denuncia interpuesta por el propio concejal desde "hace meses" y "al menos la de uno de nuestros responsables en el Ayuntamiento, nuestro jefe de obras, por difusión de datos privados como las matrículas de nuestros coches en redes sociales, por amenazas y por intentos de agresión".

El edil ha anunciado que tomará medidas legales "porque lo que ha difundido en los medios de comunicación y al parecer en una denuncia no tiene nada que ver con la realidad. Sólo responde a su afán de hacer daño en la precampaña política".

Por último, el concejal ha lamentado que haya gente que se "sirva de mentiras y falsedades para hacer daño", y declara que este vecino "tendrá que responder ante la ley por las calumnias que ha levantado con el único afán de manchar nuestra imagen y sembrar dudas en un periodo tan complicado como el momento electoral en el que nos encontramos".

La denuncia, promovida por Juan Carlos V.F., cuyo nombre coincide por cierto con quien cerraba la candidatura del PP a la Alcaldía de Bormujos en las elecciones municipales de 2011, expone que el pasado 7 de abril, frente a la Jefatura de la Policía Local de este municipio aljarafeño, el concejal popular Pablo Murillo le habría hecho supuestamente "una señal como de cortarle el cuello", a lo que el denunciante habría respondido haciéndole el gesto "del dedo".

Tras este intercambio de comunicación no verbal, según esta denuncia recogida por Europa Press, el concejal se habría dirigido hacia el denunciante tachándole presuntamente de "hijo de puta" y acusándole de causar desperfectos en su vehículo particular. El concejal, además y siempre presuntamente, le habría intentado "dar un puñetazo" a este hombre, si bien el denunciante habría esquivado el golpe.