La alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, ha exigido este lunes que "pidan perdón" quienes han estado haciendo "durante dos largos años, un juicio paralelo a las tres acusadas y a este Ayuntamiento, tanto a los responsables políticos como a los funcionarios municipales" por el caso de la Casas Cuna.

Gamarra ha comparecido esta mañana en rueda de prensa, junto con la concejala de Familia y Política Social, Paloma Corres, tras conocerse la sentencia por los presuntos malos tratos ocurridos en la guardería municipal de la Casa Cuna, de las que se acusaba a la directora y a dos trabajadoras de centro, gestionado por la empresa Eulen.

Ha considerado que dar a conocer el fallo absolutorio es necesario por parte municipal, "por la relevancia pública del caso, que ha generado alarma social y ha dado lugar a un juicio paralelo durante dos largos años, que ha hecho un daño irreparable".

La primera edil ha reiterado que "la sentencia es contundente en todos sus extremos, no ha habido prueba alguna, ninguna de las tres personas que han sido objeto del proceso judicial han sido responsables de nada, nada queda probado porque nada ha ocurrido".

Ha repasado algunas partes de la sentencia, deteniéndose especialmente en las que aseguran que "no hay pruebas" de ninguna conducta constitutiva de delito por parte de la directora del centro, ni de ninguna de las dos trabajadoras acusadas, así como en las valoraciones que la jueza del caso hace en el fallo de los testimonios acusatorios.

Como ha señalado Gamarra, sobre las presuntas agresiones, se apunta acerca de varios testigos que "hablan con inverosimilitud", de "sospechas de parcialidad", "prejuicios y sobredimensionamiento de los hechos sacados de contexto conforme a interés personal", todos ellos comentarios relativos a una de las testigos.

Ha insistido en que, en varias ocasiones, se indica acerca de varios testimonios más que "callaron porque no tenían nada que contar", que se trata de "testigos artificiales", que "fallan a la verdad", o incluso que "no se había aprendido bien su papel por estar lejos de sus compañeras y residir fuera de Logroño".

En el caso de los presuntos casos de encierros a los pequeños, el fallo "dice que no eran tales" y ha añadido Gamarra que la sentencia apunta a un "método procedente y útil, sin ninguna conducta degradante". "Queda totalmente descreditado todo lo que se ha estado diciendo en estos dos últimos años", ha afirmado.

"grave daño".

Para la alcaldesa, "se ha hecho un grave daño profesional y personal a muchas personas, sobre todo a las acusadas, en un procedimiento penal que ha sido público, pero en el que ha habido juicios paralelos en los que estas personas y otras han sido dañadas de manera irreparable y dificilmente superable".

Con todo, ha recalcado una vez más que "la sentencia no deja dudas acerca de que estas tres personas no son responsables de nada, porque no ha pasado nada". Frente a esta situación, la primera edil ha apuntado que "durante todo el caso, hemos estado quienes hemos actuado con prudencia y quienes han visto en el ataque una forma de arañar unos votos".

Así, ha apuntado que, junto con las acusadas, funcionarios y responsables políticos municipales "han sido objeto de linchamiento por un tema político", y ha citado, expresamente, a Paloma Corres, "que ha estado ahí aguantando y actuando desde la prudencia y la responsabilidad", junto con los funcionarios de Educación.

"Hay que marcar una línea, que es el todo vale, y que se ha saltado. Eso es indecente y miserable", ha reseñado la primera edil, quien ha hablado de "PSOE, PR y otros partidos, que han visto en este tema una posibilidad de sacar rédito político, dando por probados hechos que no lo eran o dejando de lado la presunción de inocencia, y lo que es más grave, creando alarma social".

"Esa línea no debe superarse -ha insistido- quienes la han pasado deberían pedir disculpas públicamente a las personas acusadas, que han sido víctimas de un juicio paralelo, y a los responsables políticos, funcionarios y empresa. Y, además de pedir perdón, a mi juicio, estas personas han quedado incapacitadas para seguir en el noble ejercicio de la política".

Medidas municipales.

Gamarra ha subrayado que la sentencia también incide en las medidas de control que debe tomar el Ayuntamiento, "y que ya se están adoptando", con la introducción del contrato social, ya en marcha en la nueva licitación del Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD).

En este contrato social, como ha reiterado la alcadesa, se hace hincapié en el control de las condiciones laborales de los trabajadores de las empresas contratadas por el Ayuntamiento. "Ahora mismo, la relación con Eulen está marcada por un pliego de 2010, y donde no hay este control", ha dicho la alcaldesa.

Ha recordado que este contrato de las guarderías, en concreto, no finaliza hasta 2016, y que, mientras tanto, no se puede resolver. Ha distinguido este tema penal del meramente administrativo, por el que ya hubo una sanción en 2012.

A ello ha sumado que, en esta misma línea, se abrió expediente por parte municipal al inicio de este caso, "pero que está suspendido a la espera del cierre del tema judicial", ya que, como ha recordado, "la sentencia no es firme. "Si se demuestra que ha habido desorganización, se tomarán medidas y se sancionará sin problemas", ha finalizado.