Entre sus aficiones siempre estuvo la escritura. Desde los 13 años documentó vivencias en diarios que suman 43.000 páginas, 141 volúmenes. Años después de morir, la publicación de los textos la convirtieron en una autora de éxito. La Reina Victoria del Reino Unido (1819-1901), una de las monarcas más influyentes de la historia del país, fue un icono nacional británico en una era de imperialismo y esplendor económico y su atractivo como personaje histórico sigue intacto.

Siempre tuvo que lidiar con un aspecto físico poco atractivo, se convirtió en reina a los 18 años, fue la primera monarca británica en ser Emperatriz de la India, se casó —profundamente enamorada— con su primo, el Príncipe Alberto de Sajonia-Coburgo-Gotha, y la muerte de él la sumió en un luto perpetuo, era llamada "la abuela de Europa" por tener una abundante descendencia que se emparentó con casas reales de todo el continente, fue pionera en documentar su vida familiar en fotos...

Ahora, su faceta literaria vuelve a avivarse. El Royal Collection Trust anuncia para verano la publicación de una historia que Victoria escribió cuando tenía 10 años: The Adventures of Alice Laselles, by Alexandrina Victoria, Aged 10 and 3/4 (Las aventuras de Alice Laselles, por Alexandrina Victoria, de 10 y 3/4 años de edad), una novela infantil que demuestra las tempranas destrezas narrativas de la joven autora.

Escrita en un modesto cuaderno escolar de tapas rojas —ahora conservado en los Archivos Reales del Castillo de Windsor— la obra la protagoniza Alice, una niña de 12 años, huérfana de madre, que es enviada a un internado cuando su padre vuelve a casarse. Como era típico de la literatura para niños en el siglo XIX, la historia tiende a lo dramático. En el pasaje en que Alice se entera de que irá al "internado femenino de la Señora Duncombe", la entonces princesa se recrea en los lloros "amargos" de la protagonista.

Ya en el colegio presenta a otras niñas, como Barbara —la inteligente hija de un banquero, que exhibía un orgullo "que estropeaba su por lo demás elegante expresión"—, la "pobre y pequeña huérfana francesa" Ernestine Duval —que sufrió de viruela y a consecuencia de la enfermedad "había perdido un ojo"— o Diana O'Reilly, que tras la muerte de su madre vivió con una niñera durante 10 años. A la vuelta de la India, el padre de Diana descubrió que su hija hablaba con un "ininteligible" acento irlandés y la mandó "directamente" al internado.

La obra más temprana de la Reina Victoria jamás publicada, el tomo verá la luz el 8 de junio de este año e irá a compañado por ilustraciones para las que se han empleado las recortables que ella misma elaboró de los personajes junto a su institutriz (la Baronesa Louise Lehzen). El diseñador italiano Felix Petruska ha manipulado digitalmente los originales y la ilustradora italiana Cristina Pieropan los ha completado para convertirlos en escenas.