La ministra de Fomento, Ana Pastor, ha mantenido una reunión con el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, tras la que han anunciado el cierre del proyecto definitivo y del convenio para ejecutar los accesos a San Nicolás Oeste a través de la SE-20, con el objetivo de favorecer la instalación de Ikea en los citados terrenos.

Este convenio habrá de ser aprobado por el Consejo de Ministros, tras lo que se procederá firmar el convenio y a licitar las obras, que tardarían menos de dos años. Por su parte, los dueños de los terrenos, también presentes en la reunión, apuntan a una inversión de más de 60 millones de euros en el desarrollo de unos suelos en los que la multinacional sueca podría quedar plenamente instalada en tres años, si se simultanean ambas obras.

En este marco, Pastor ha explicado que esta es la última reunión de trabajo para tratar este asunto ya que se ha finalizado este proyecto que procurará "más riqueza y crecimiento la ciudad". Así, explica que, "si todo va bien", será aprobado de forma "inminente" por el Consejo de Ministros y en los siguientes días se firmará el acuerdo por parte de Zoido y de la propia Pastor para que haya "una renovada vía para la mejora de esa zona comercial e industrial, además de mejorar la entrada del aeropuerto y la movilidad de millones de ciudadanos".

Recuerda que para el desarrollo de estas actuaciones se invertirán 13 millones de euros por parte del Estado, mientras que el Ayuntamiento aporta suelos y el arreglo de otras vías. Pastor destaca que la consignación presupuestaria "ya está hecha y lo que falta es el trámite del Consejo de Ministros, tras lo que se licitarán las obras". "Se hará lo antes posible, dependiendo de los informes técnicos, y ,una vez licitadas, se tardan en ejecutar menos de dos años", recalca.

En la misma línea, Zoido destaca una obra que supondrá la creación de "miles de puestos de trabajo de la mano de una inversión privada" y recuerda que, aunque hubo acuerdo sobre el desarrollo de la SE-35, la actuación quedó paralizada por el expediente abierto por la Unión Europea, lo que llevó a rediseñar el proyecto de accesos, que este miércoles ha quedado concluido.

De este modo, explica que se ejecutará un nudo de comunicaciones, se remozará todo el trazado de la SE-20 y se actualizará, "con lo que habrá tres accesos a San Nicolás Oeste, entre las que se encuentra una gran rotonda, obra de ingeniería compleja", según agrega Pastor.

Zoido destaca la "voluntad" aportada por la ministra para colaborar en el rediseño de la actuación, dejando claro que la Junta de Andalucía "no ha querido colaborar", por lo que son "sólo dos las Administraciones que resuelven el problema, el Estado y el Ayuntamiento".

"Cuando se trabaja de modo conjunto, sumando voluntades, se puede conseguir un objetivo tan importante para la ciudad, para crear empleo y para poner en carga no sólo esos terrenos, a lo que se suma que con pequeñas obras posteriores se dará acceso al Higuerón Norte, donde existen unos terrenos de Iberdrola que también los quiere desarrollar", subraya, añadiendo que todo esto se ha hecho "salvaguardando los principios de legalidad y siendo competitivos".

Por su parte, José Luis Gutiérrez y José Luis González Palomino, representantes de la Junta de Compensación San Nicolás Oeste, han mostrado su satisfacción por el desarrollo de este convenio que conlleva el desarrollo del suelo completo así como de las inversiones previstas, señalando que se prevén unas inversiones directas de los propietarios de 60 millones de euros, a lo que suman el montante que aportaría Ikea para sus obras y el del resto de sectores.

Recuerdan que en el acuerdo firmado con Ikea está previsto el acceso de la SE-35 con la SE-20 y matizan que actualmente hay que desarrollar el suelo y su urbanización, por lo que "en unos tres años estará listo". Así, indican que la empresa sueca tardaría unos dos años en sus obras, ante lo que apuestan por que ambas actuaciones se simultaneen para ahorrar tiempo, ya que si no tardaría unos cinco años.

Igualmente, afirman que por el momento no les consta la instalación de otras empresas en la zona, ya que aseguran que ahora comenzarán a mover la comercialización de la zona porque antes "no se tenía la seguridad de los accesos".