El presidente del Gobierno de Ceuta, Juan Vivas (PP), ha tachado de "insensata" y de "indebida" la actitud del Comité Ejecutivo de la Federación de Bancos de Alimentos (Fesbal), que ha decidido anular la celebración de su XX Congreso Nacional de Bancos de Alimentos en la ciudad autónoma el próximo mes de abril por, entre otras razones, la amenaza yihadista.

"No tengo ningún dato que respalde que ese insensato comportamiento se haya trasladado al ámbito comercial o turístico", ha asegurado este miércoles el líder del Ejecutivo autonómico en declaraciones a los medios tras conocer la anulación de la cita programada para los días 17 y 18 de abril.

Vivas ha destacado que "todo el mundo sabe" que la amenaza terrorista "es cierta pero extendida a toda España y a toda la Unión Europea". "Focalizar el riesgo en Ceuta no tiene sentido y es innecesario porque, además, podían haber apelado a miles de excusas en lugar de a esa, con cuya publicación se genera inquietud", ha lamentado.

El Comité Ejecutivo de Fesbal informó la semana pasada al Banco de Alimentos de Ceuta de su negativa a celebrar la reunión de todas sus sedes regionales en la ciudad autónoma tras haber "recibido varias llamadas telefónicas de distintos Bancos de Alimentos de la península, manifestando ser reacios a venir a Ceuta debido al transporte, lejanía, factor de la climatología en el mes de abril y las manifestaciones en los distintos medios de comunicación nacional sobre el yihadismo, la seguridad, etcétera".

La Federación de Bancos de Alimentos de Andalucía, Ceuta y Melilla (FABA), "en solidaridad con el Banco de Ceuta y sabiendo el trabajo tan concienzudo que se había efectuado" para preparar el Congreso Nacional ha propuesto celebrar su Asamblea Anual en junio en la localidad norteafricana.

Custodia policial para los autobuses urbanos

Por otro lado, el presidente de la Ciudad se ha mostrado este miércoles dispuesto a adoptar "cuantas medidas sean necesarias" para "garantizar la prestación del servicio público de transporte público en autobús urbano" después de que durante los últimos días sus vehículos y conductores hayan sufrido distintos actos vandálicos a su paso por la barriada del Príncipe.

Entre las opciones que baraja el Ejecutivo local se cuentan, según ha explicado Vivas, que ha querido ser "prudente" en sus manifestaciones, las de dotar de custodia policial "permanente" a los autobuses y la instalación de cámaras de videovigilancia "en el interior o en el exterior de los automóviles, según dictaminen los técnicos y expertos".

Los ataques a los autobuses urbanos y otros servicios públicos en el Príncipe y otros puntos de la periferia se reproducen cíclicamente en una ciudad que en 2011 tipificó como infracción grave "causar deterioros en los vehículos del servicio público del transporte colectivo de viajeros/as por comportamientos incívicos o el uso inadecuado de los mismos, cuando el hecho no pueda calificarse como infracción penal".