Recomendaciones

Orden: Procura mantener la mesa limpia y ordenada, ya que la desorganización suele aumentar el estrés de los trabajadores. Podemos llegar a perder una media de 20 minutos todos los días buscando una nota, un bolígrafo, una grapadora y demás enseres de oficina.

Originalidad: Tunear el puesto de trabajo no está reñido con ser práctico. Aprovecha la funcionalidad de ciertos elementos para personalizar tu mesa; por ejemplo, recoge los bolígrafos en un cubilete decorado por ti o pon un calendario temático o de ciudades de ensueño. Si te gusta la pintura, adquiere uno que tenga reproducciones de tu pintor favorito.

Personal: También puedes poner la imagen de alguien querido o de un momento que te traiga buenos recuerdos personales. Además, hay portarretratos que no sólo sirven para poner fotos, sino que tienen añadido un bloc de notas, un cuenco para lápices o un imán o pinza para poner el recordatorio del día.

Ordenador: Si trabajas ante una pantalla de ordenador, puedes tener una imagen como tapiz que no sea la predeterminada por el programa y colocar una alfombrilla decorativa para el ratón. Son sólo pequeños detalles, aparentemente sin importancia que, sin embargo, pueden hacer que te sientas más cómodo y que sonrías más a menudo.

Adornos que no restan eficacia

Tu lugar de trabajo se animará visiblemente si colocas alguna planta que no necesite demasiadas atenciones –algunos días a la semana estará desatendida–. Procura que no sea demasiado aparatosa y que no te impida realizar tus funciones correctamente. Por ejemplo, si trabajas conduciendo, nada debe restarte visibilidad ni taparte los espejos; si lo haces con niños, no podrás tener elementos peligrosos, como objetos pequeños o punzantes a su alcance, como un simple clip.