Una treintena de menores extranjeros no acompañados han sido interceptados este martes en el puerto de Melilla cuando esperaban una oportunidad en la escollera de viajar como polizones en los barcos de pasajeros y mercancías que unen Melilla con Málaga, Almería o Motril (Granada).

Según han informado a Europa Press fuentes policiales, la intervención ha sido realizada desde primeras horas de este martes por un dispositivo conjunto formado por Guardia Civil, Policía Nacional y Policía Local, apoyado por el aire por un helicóptero del Instituto Armado. La acción se ha efectuado entre las rocas de la zona costera más próxima al Puerto, lugar donde se esconden los menores para intentar "colarse" en los barcos.

La actuación se ha saldado hasta el momento con la interceptación de "unos treinta chavales", casi todos aparentemente menores de edad y de nacionalidad marroquí, a los que se tomará su filiación. Si tienen menos de 18 años, han añadido las citadas fuentes, serán llevados al Centro de Acogida de Menores pero si tienen más de 18 años y se comprueba que efectivamente son marroquíes, serán repatriados automáticamente por la frontera terrestre de Beni-Enzar, como permite el acuerdo existente entre España y Marruecos.

Este tipo de intervenciones se realizan periódicamente, cada varios meses, si bien desde los sindicatos policiales y asociaciones de guardias civiles siempre se han quejado de que no sirven de mucho, porque los menores no pueden ser repatriados y en cuanto son llevados al Centro de Acogida de Menores, donde están en régimen de abierto, regresan en cuanto pueden a las escolleras del puerto "y vuelta a empezar".