La directora general de Violencia de Género y Asistencia a Víctimas de la Junta, Encarnación Aguilar, ha considera este martes "esencial" que clubes, jugadores, árbitros y aficionados de las competiciones deportivas de masas, fundamentalmente el fútbol, "exhiban una conducta ejemplar y rechacen todo tipo de violencia contra las mujeres".

En una mesa redonda que ha tenido lugar en la Facultad de Ciencias del Deporte de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla para abordar la situación de la mujer en el deporte, Aguilar ha subrayado la necesidad de trabajar para "erradicar comportamientos machistas, vejatorios e insultantes hacia las mujeres en las competiciones deportivas", según una nota.

El deporte, afirma la responsable en la Junta de la lucha contra la violencia de género, constituye "una gran oportunidad" para potenciar la transmisión de valores como los del trabajo en equipo, el juego limpio, cultura del esfuerzo y compromiso, sobre todo entre la juventud y los menores de edad.

Aguilar ha denunciado escenas como las de una mujer árbitro en Cádiz que fue insultada por el público con expresiones como "vete a casa a fregar". "No debemos ser tolerantes en ningún sitio con la violencia machista que sigue causando tantas muertes de mujeres en nuestro país", ha recalcado la directora.

Igualmente, la directora general de Violencia de Género considera que las personas que son líderes o referentes sociales, como ocurre en el mundo del deporte, "deben ser ejemplares" en su comportamiento para proyectar entre sus seguidores valores que contribuyan a construir una sociedad mejor y en la que prime la igualdad entre hombres y mujeres.

Recientemente, Aguilar ya mostró su apoyo a la investigación abierta por la Fiscalía de Sevilla por los cánticos machistas coreados por un grupo de aficionados del Betis contra la expareja del futbolista Rubén Castro, imputado por un presunto delito de malos tratos

Aguilar denunció al respecto "la doble victimización que supone para esta mujer los insultos degradantes y humillantes recibidos en un evento público y que se suman al sufrimiento por los presuntos malos tratos recibidos y al calvario por el proceso judicial que está soportando la víctima".