Alrededor de 151 millones de euros. Esa es la cantidad anual que el Ayuntamiento (46 millones) y la Comunidad de Madrid (105 millones) destinaron en 2014 al pago del alquiler de sus distintas sedes de concejalías, organismos públicos y oficinas municipales o autonómicas, según los datos aportados por el Consistorio y por la Consejería de Economía, respectivamente. Sin embargo, los madrileños podrían ahorrarse unos cuantos millones de euros al año si ambas administraciones (sobre todo, la local) hicieran uso de las decenas de locales vacíos o infrautilizados de su propiedad que tienen repartidos por la región.

Según un informe elaborado por Izquierda Unida, el Ayuntamiento tiene al menos una decena de grandes edificios que podrían albergar perfectamente cualquiera de las sedes municipales. Uno de los casos más llamativo es el del antiguo mercado de frutas de Legazpi, con una superficie edificada de 40.000 metros cuadrados, que lleva abandonado en su mayor parte desde los 80, aunque hace unos años se utilizó una parte como sede del SAMUR. En 2008, se  planteó la posibilidad de trasladar allí la sede de la Gerencia de Urbanismo, pero la idea se descartó con la llegada de la crisis. Ahora se está intentando impulsar su uso como mercado, biblioteca, polideportivo y centro comercial, aunque el proyecto todavía se encuentra en una fase inicial.

Otros inmuebles que señala el documento son la Finca Torre Arias (7.000 metros cuadrados), el edificio Hexágonos (5.636), la Casa de la Villa (4.000), el Palacio de Cañete (3.500), la Casa de la Duquesa de Sueca (3.500), la Quinta de los Molinos (3.500), la Casa Portugal (2.000), el palacete de la Casa de Campo (1.900) y la Casa de la Carnicería (1.304). Algunos de ellos ya tienen un uso previsto para el futuro, como la Casa de la Carnicería (como hotel) o la Finca Torre Arias (como equipamiento educativo privado).

El mismo documento señala que el Consistorio que encabeza Ana Botella paga 12.929.363 millones de euros por la sede de Economía y Hacienda (Alcalá, 45), 9.317.092 millones por la sede de Seguridad (calle Albarracín) y 6.802.509 por la sede de Medio Ambiente y Movilidad (calle Bustamante), entre otros.

"El PP alquila edificios con el dinero de todos los madrileños mientras tiene inmuebles vacíos y en desuso por su mala gestión. Con una mano descuida el patrimonio público y con la otra malgasta nuestro dinero", denuncia David Ortega, portavoz municipal de UPyD, que apunta otro inmueble abandonado, el antiguo edificio de la UNED: "Paseo del Prado, 30 se encuentra en pésimas condiciones a la espera de un prometido Museo del Arte y la Arquitectura del que ahora nadie en el Ayuntamiento sabe nada".

Los vecinos de Madrid también lamentan esta situación, que califican de "despilfarro": "Es inadmisible que el Ayuntamiento esté despilfarrando el dinero público en alquileres mientras tiene edificios vacíos que también le está suponiendo un gasto en mantenimiento y seguridad privada, como es el caso de la nave Boetticher de Villaverde", opina Vicente Pérez, responsable de Urbanismo de la Federación Regional de Vecinos (Fravm). Otro espacio susceptible de albergar dependencias municipales es el Balcón de Rosales, un inmueble para el que no se acaba de encontrar uso.

Por su parte, el urbanista Carlos Lahoz, autor del estudio ‘El valor del vacío’, un informe sobre los inmuebles infrautilizados en la capital, asegura que en muchas ocasiones "los costes de las operaciones de adecuar un inmueble a una determinadas características están por encima del coste de alquilar otro espacio", pero critica la rigidez del Consistorio a la hora de facilitar el uso de los inmuebles vacíos. "No existe flexibilidad para generar las fórmulas legales que permitan dotar a un inmueble, aunque solo sea durante un tiempo, de uso diferente al que estaba destinado en principio",  sostiene Lahoz, que pone un ejemplo: "En el Centro Municipal de Escuelas Pías, en la calle Hortaleza, hay un gran espacio que en principio iba a ser una escuela de música y que finalmente por falta de presupuesto no se está utilizando. Pues bien, ese espacio no se puede utilizar sino es para algo relacionado con el uso previsto, cuando perfectamente podría tener un uso vecinal o de cualquier otro tipo".

Desde el Ayuntamiento defienden que la mayoría de edificios vacíos de su propiedad "son edificios protegidos o muy pequeños que no se adaptan a necesidades del servicio que se presta. En muchos casos, no cumplen con las condiciones ni el tamaño necesario para albergar oficinas administrativas". El Consistorio destaca que en los últimos años ha ahorrado casi 16 millones de euros en alquileres de inmuebles: "La reducción del número de contratos de arrendamiento de edificios hasta finales de 2014 es de 37 contratos de los 83 vigentes en 2011". Para ello, el Consistorio ha unificado sedes y realizado obras para adecuar algunos de sus inmuebles.

Por su parte, la Comunidad de Madrid tiene previsto gastar en 2015 en arrendamientos de inmuebles 100 millones, mientras que en 2014 destinó 105 millones. La administración que dirige Ignacio González también posee muchos locales vacíos, pero en su caso la gran mayoría no son susceptibles de acoger grandes sedes regionales. "La Comunidad de Madrid posee decenas de locales, pero la mayoría son bajos procedentes de las promociones del Ivima que son insuficientes para centralizar los servicios", explica el Grupo de Izquierda Unida en la Asamblea de Madrid, que denuncia que el Gobierno regional lleva algún tiempo vendiendo sus propios edificios para luego alquilarlos.

En cualquier caso, también tienen grandes inmuebles en desuso, como el edificio del Instituto de Medicina Legal en Valdebebas (que previsiblemente se ocupará desde el próximo verano) o el parque de Bomberos de Valdemoro. Desde el Gobierno regional aseguran que en el periodo 2009-2014 se han ahorrado unos 27 millones de euros en alquileres gracias a la extinción de 79 contratos.