El empresario y ex miembro de los servicios secretos rusos Andréi Lugovói sostiene que es inocente del asesinato en Londres del antiguo espía Alexandr Litvinenko y ha considerado "políticas" las acusaciones vertidas de la Fiscalía británica.

"La acusación, sin lugar a dudas, tiene un trasfondo político. Yo no maté a Litvinenko, no tengo ninguna relación con su muerte", declaró Lugovói, citado por las agencias rusas.

Además de defenderse, el principal acusado en relación con el asesinato de Litvinenko en noviembre del pasado año con polonio 210, adelantó que pronto hará una declaración "que causará conmoción en la opinión publica británica": "ésta cambiará radicalmente la valoración de los eventos acontecidos en los últimos años en el Reino Unido en torno a varias figuras de origen ruso", aseguró.

Rusia se niega a extraditarle

El ex agente del KGB, de 42 años, matizó que aún no ha recibido notificación oficial de que las autoridades británicas pedirán su extradición para que sea juzgado en ese país y que se enteró de la noticia por la prensa; no obstante, la Fiscalía rusa ya ha asegurado que no extraditará a Lugovói aduciendo que lo impide artículo 61 de la Constitución rusa: "Un ciudadano ruso no puede ser entregado (extraditado) a otro Estado".

Eso sí, el fiscal general, Yuri Chaika, dejó abierta la posibilidad de que Lugovói sea juzgado en territorio ruso si se confirma su culpabilidad.

Desconfía de las pruebas recabadas por la Justicia británica

"Con conocimiento de causa, puedo expresar mi desconfianza en las pruebas recabadas por la Justicia británica", apuntó.

Lugovói, que abandonó los servicios secretos rusos en 1996 para ingresar en la empresa privada, se reunió hasta en cuatro ocasiones con Litvinenko en Londres entre mediados de octubre y el día de su hospitalización, el 1 de noviembre de 2006.

Fue interrogado en diciembre por Scotland Yard

Detectives británicos hallaron rastros del isótopo polonio 210, sustancia radiactiva altamente tóxica, en los aviones en los que Lugovói voló a Londres y regresó a Moscú, y también en las habitaciones de hotel donde se hospedó.

Lugovói fue interrogado en diciembre pasado en Moscú por los representantes de la Justicia británica y agentes de Scotland Yard en presencia de miembros de la Fiscalía rusa.